Impulsor de las energías renovables en España, Jiménez Beltrán desarrolló el proyecto de rehabilitación de la finca del Castillo de Chuecos en Águilas, localidad donde residía desde hace más de 20 años
Domingo Jiménez Beltrán, primer director ejecutivo de la Agencia Europea de Medio Ambiente, y anteriormente director general de Medio Ambiente en el llamado Ministerio de Obras Públicas, Transportes y Medio Ambiente (Moptma), ha fallecido este martes en su casa de Águilas, donde residía desde hace más de 20 años.
La vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha manifestado sus condolencias tras asegurar en su cuenta de Twitter que "el Sol brilla hoy un poco menos". Ribera se ha referido a Jiménez Beltrán como un hombre "resiliente y peleón", que ha dejado una "huella positiva en todos los que lo conocimos".
"Es difícil imaginar un mundo justo y sostenible sin Domingo Jiménez Beltrán", ha añadido la ministra para la Transición Ecológica.
El sol brilla hoy un poco menos. Es difícil maginar un mundo justo y sostenible sin Domingo Jiménez Beltrán. Dtor de @EU_ENV, del Observatorio de sostenibilidad, de la @FRenovables. Resiliente y peleón. Desde Calatorao a Aguilas dejando huella positiva en todos los q lo conocimos pic.twitter.com/jiUJPT5iJG
— Teresa Ribera (@Teresaribera) February 7, 2023
También el secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, ha manifestado sus condolencias y ha dicho que la ausencia de Jiménez Beltrán "deja un enorme vacío en el activismo medioambiental, pero también un legado imposible de igualar". "Mi personal agradecimiento a su generosidad sin límite", ha añadido Morán.
Jiménez Beltrán impulsó el proyecto de rehabilitación de la finca del Castillo de Chuecos en Águilas. En agosto de 2022 le entrevistábamos en Onda Regional, y subrayaba la importancia de una buena gestión de los recursos y ponía de ejemplo Murcia donde el uso del agua es eficiente pero no eficaz.
Beltrán, quién también ha sido galardonado con el premio nacional de medioambiente en 2007, nos confesaba su temor ante el avance del 'Green Washing', es decir el desarrollo de la producción de energía nuclear y gas, consideradas como energías necesarias para una transición verde, aprovechando la coyuntura de un contexto de escasez energética motivada por el conflicto bélico tras la invasión de Rusa de Ucrania.