"Las circunstancias son las que son y toca hacer de la necesidad virtud", ha señalado el candidato socialista en la primera jornada del debate de investidura
REDACCIÓN | AGENCIAS
El candidato del PSOE a la investidura, Pedro Sánchez, ha justificado la concesión de una amnistía a los involucrados en el proceso independentista en Cataluña, asegurando que "las circunstancias son las que son".
En su primera intervención ante los diputados para pedir su confianza, ha defendido la ley y ha asegurado que es "perfectamente legal" y "acorde con la Constitución", a pesar de que antes de las elecciones del 23J, el propio Sánchez sostenía que una amnistía no era posible porque era inconstitucional.
Así lo ha dicho Sánchez en sus primeras palabras desde la tribuna en esta sesión de investidura que pueden seguir en directo en la programación y en la web de ONDA REGIONAL DE MURCIA el miércoles y el jueves.
"Las circunstancias son las que son y toca hacer de la necesidad virtud", ha señalado Sánchez, utilizando la misma expresión que lanzó en el último Comité Federal del PSOE, cuando defendió la amnistía por primera vez ante su partido. Además ha subrayado que toma esta medida por "interés general", en primer lugar para consolidar "los avances" logrados en los últimos cuatro años y para "seguir avanzando por la senda de la convivencia y del progreso", según ha expresado.
Sánchez ha pedido al PP "responsabilidad y coherencia" ante la futura ley de amnistía y que se comporte como un partido de Estado y no actúe "al dictado de una organización ultraderechista", en referencia a Vox. El candidato se ha dirigido a la bancada de la derecha para pedirles que "no vuelvan a cometer los errores que han cometido siempre" y "no aprovechen esta situación para incendiar las calles y cuestionar la legitimad de todo Gobierno que no sea del PP".
Al partido encabezado por Alberto Núñez Feijóo, Sánchez le ha pedido que no secunde a Vox y a su "deriva trumpista" y que no vuelvan a sembrar la "discordia" y el "odio" como hicieron en el pasado al preconizar un boicot a los productos catalanes. Ante las denuncias de PP y Vox, el secretario general del PSOE ha recordado que en el Gobierno el PP -en la etapa de José María Aznar- concedió 1.400 indultos en un día e indulto "durante una investidura" a terroristas de Terra Lliure.
"Qué escándalo señor Feijóo, que escándalo", ha ironizado al respecto el presidente en funciones. Sánchez ha recalcado además que la amnistía se aprobará con total transparencia y no será el ataque a la constitución del 78 que vaticina la derecha.
Continuamente interrumpido por las quejas de sus adversarios políticos, Sánchez ha defendido que el problema de PP y Vox no es con la amnistía, sino con la reedición del Gobierno y les ha acusado de no aceptar el resultado del 23J
El candidato del PSOE a la Presidencia del Gobierno, Pedro Sánchez, ha comenzado su intervención en la sesión de investidura asegurando que respeta las "manifestaciones pacíficas" promovidas por PP y Vox contra sus pactos de Gobierno, aunque ha apostillado que la Constitución "solo contempla una forma superior de ejercicio democrático y es votar en las elecciones".
Sánchez ha querido comenzar reaccionando a las manifestaciones promovidas en los últimos días por PP y Vox contra la amnistía y el resto de pactos con las formaciones independentistas. En este contexto, ha dicho respetar estas concentraciones cuando han sido pacíficas, trasladando a su vez su "reconocimiento" porque, según ha dicho, han ejercido un "derecho constitucional de participación política".
Sin embargo, ha puntualizado que la Constitución "solo contempla una forma superior de ejercicio democrático y es votar en las elecciones". "Precisamente ese es el procedimiento que la Constitución señala para la formación del Gobierno y, en consecuencia, también para la investidura de la presidencia del Gobierno", ha agregado.
Ha denunciado que ya estamos viendo las consecuencias de los pactos de la ignominia" entre el PP y Vox, y ha lamentado que Alberto Núñez Feijóo haya "blanqueado y legitimado" a la "ultraderecha" para llegar al poder.
Sánchez ha lamentado que tras las elecciones autonómicas y municipales del 28 de mayo el PP no optara por ser una "derecha responsable que comprende la necesidad de frenar el avance de la ultraderecha antes de que sea demasiado tarde" y que optara por ser una "derecha irresponsable que blanquea y legitima para llegar al poder a la ultarderecha". "(Feijóo) bendijo a la ultraderecha y le abrió las puertas a cinco gobiernos autonómicos (...) y 135 ayuntamientos", ha añadido Sánchez, que ha lamentado que ahora estamos viendo las consecuencias de estos "pactos de la ignominia".
Por otra parte Sánchez ha anunciado la extensión de la rebaja del impuesto sobre el valor añadido (IVA) de los alimentos hasta junio de 2024 y la gratuidad, a partir del 1 de enero, del transporte público para todos los menores y jóvenes y para las personas desempleadas.
Sánchez también ha avanzado que en los próximos meses se elevará el umbral de renta media de los 30.000 euros actuales a los 38.000 euros para que más familias puedan acogerse a las medidas de alivio hipotecario en vigor.
"Esto consiste en la congelación de la cuota mensual durante un año y la ampliación del plazo de amortización hasta los siete años", ha explicado el jefe del Ejecutivo en funciones durante su primera intervención en el debate de investidura.
El líder del PSOE ha asegurado que el nuevo gobierno progresista se compromete sacar adelante un pacto de Estado por los derechos de las personas LGTBI. Sánchez ha cargado contra los pactos entre el PP y Vox y ha criticado en concreto al Gobierno de Madrid por anunciar la "derogación" por el trámite de urgencia las leyes LGTBI y el "desmantelamiento" de la red contra la LGTBIfobia.
Supone, a su juicio, recortar derechos y libertades y "hacer aún mas vulnerable a quien ya se siente vulnerable".
En este contexto, ha considerado que hoy más que nunca es necesario un pacto de Estado por los derechos de las personas LGTBI y ha garantizado que el nuevo gobierno se compromete a aprobarlo.
Sánchez pedirá la confianza de los diputados una vez que ha sellado un acuerdo de Gobierno de coalición con Sumar y tras recabar los apoyos de ERC, Junts, Bildu, PNV, BNG y Coalición Canaria, en total 179 diputados, tres por encima de la mayoría absoluta requerida.
Según lo esperado, solo será necesaria la primera votación y por tanto, será elegido presidente al finalizar la segunda jornada del debate, es decir el jueves 16 de noviembre por la tarde. Las cuentas del PSOE pasan por lograr esos 179 'síes' frente a los 171 'noes' de PP, Vox y UPN, sin que haya ninguna abstención.
De no lograr la mayoría absoluta, tendría que repetirse la votación 48 horas después de la primera, pero en ese caso solo sería necesaria mayoría simple. Si finalmente sale elegido, sería la primera vez en democracia que un candidato es presidente del Gobierno a pesar de que su formación no haya quedado en primer lugar en las elecciones.
De todos los pactos que ha tenido que sellar con las distintas formaciones para conseguir sus votos favorables, el que ha recibido más reproches de la oposición y el que tendrá más eco en sus intervenciones de este miércoles es la ley de amnistía que beneficiará a unos 300 implicados en el procés, entre ellos los principales líderes separatistas.
La semana pasada, el PSOE logró desencallar el acuerdo con Junts, después de que el secretario de Organización de los socialistas, Santos Cerdán, tuviera que pasar cinco días negociando en Bruselas, donde reside el expresidente catalán Carles Puigdemont, huido de la justicia española desde hace seis años y uno de los principales beneficiarios de la medida de gracia.
La sesión de investidura se celebra en medio de fuertes medidas de seguridad --más de 1300 policías se desplegarán en los alrededores del Congreso-- por las protestas contra la amnistía y los pactos con las fuerzas independentistas que se vienen repitiendo en varias ciudades españolas desde hace más de 10 días.
En cualquier caso, si todo va según lo previsto, este jueves Sánchez será elegido presidente por tercera vez, cinco años después de llegar a La Moncloa por primera vez tras sacar adelante la moción de censura contra el expresidente Mariano Rajoy en 2018. Después, ganó las elecciones en 2019 y sumó los votos de Unidas Podemos a cambio de incluirles en un Gobierno de coalición.
El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, llevará esta miércoles por la tarde al debate de investidura el "clamor" que hay en la sociedad contra la amnistía que ha pactado con los independentistas para "perpetuarse en el poder", según han señalado fuentes del PP, que han avisado que los españoles "no se van a resignar" ante lo que está sucediendo.
Feijóo lo intentó los días 26 y 27 de septiembre pero no llegó al listón de la mayoría absoluta, quedándose en 172 escaños (PP, Vox, UPN CC). Ante ese debate, fuentes del PP han avanzado que Feijóo --que subirá a la tribuna a primera hora de la tarde para dar la réplica a Sánchez-- será "coherente, al contrario que el candidato del PSOE" y "no habrá cambios de opinión" sino que "defenderá lo mismo que defendía en la campaña y en su investidura".
"Es inmoral ceder a un chantaje al Estado para acceder a un cargo y es un fraude electoral presentarse a unos comicios prometiendo una cosa y haciendo luego justo la contraria", han señalado las mismas fuentes.
La primera vez que Sánchez se presentó a una investidura fue en marzo de 2016, pero no pudo sacarla adelante porque solo contó con los 131 escaños que sumaba junto a Ciudadanos, presidido entonces por Albert Rivera, y Coalición Canaria.
Ese mismo año el líder del PSOE fue desalojado de la secretaría general de su partido en un Comité Federal que generó una profunda crisis interna, entre los partidarios de permitir un Gobierno del PP y quienes, como Sánchez, se oponían y pedían una nueva convocatoria electoral al grito de 'no es no'.
Contra todo pronóstico, Sánchez ganó las primarias en el PSOE al año siguiente, recuperando la secretaría general y el liderazgo de la oposición. Y desde ahí dio el salto a La Moncloa al encabezar una moción de censura contra el entonces jefe del Ejecutivo, Mariano Rajoy (PP), gracias al apoyo del PNV, que retiró su respaldo a los 'populares' y decantó la balanza del lado socialista.
Esa primera etapa duró un aproximadamente un año, hasta que Sánchez convocó elecciones para abril de 2019, ante la imposibilidad de sacar adelante los Presupuestos Generales del Estado por falta de apoyos. El PSOE de Sánchez fue el partido más votado y se volvió a presentar a la investidura, pero tampoco logró los votos necesarios, tras fracasar el intento de acuerdo con el Podemos de Pablo Iglesias. Sánchez solo logró el 'sí' de los 123 diputados del PSOE y del único diputado del Partido Regionalista de Cantabria (PRC).
Ante la falta de una mayoría suficiente se volvieron a convocar las urnas en noviembre de 2019. PSOE y Unidas Podemos perdieron escaños pero esta vez sí llegaron a un acuerdo para una coalición y Pedro Sánchez fue elegido presidente gracias a la abstención de ERC y Bildu. Logró 167 votos a favor, 165 en contra y 18 abstenciones.
Ahora se presenta a la investidura con una mayoría más amplia a cambio de concesiones a todos los grupos que le apoyan y con un panorama legislativo muy complicado. Sánchez ha expresado en numerosas ocasiones su intención de completar la legislatura pero necesitará el apoyo de todos los socios de la investidura, que abarcan un amplio espectro ideológico, para dar luz verde a cada votación.