El Ejecutivo autonómico tasa en 50 millones de los daños de las lluvias torrenciales y pide ayudas directas al Ministerio de Agricultura
El Gobierno amplía la línea de préstamos destinada a los agricultores y ganaderos por la sequía con el fin de que también puedan acogerse a ella todos los damnificados por las últimas lluvias torrenciales. Un episodio que ha afectado a más de 7.700 hectáreas de cultivo con pérdidas que ascienden a los 50 millones de euros.
El portavoz en funciones del Gobierno Regional, Marcos Ortuño, asegura que estas lluvias han ocasionado graves daños a los cultivos de fruta de hueso, cítricos, sandía, melón y uva, así como cultivos hortícolas como la alcachofa, brócoli, coliflor y lechuga. Unos daños a los que se suman las pérdidas en infraestructuras y en futuras cosechas.
El consejero Antonio Luengo, ya se ha dirigido al Ministerio de Agricultura para reclamar ayudas directas para estos agricultores y exige al Gobierno de Pedro Sánchez que reacciones cuanto antes.