Confiesan que ambos acabaron con la vida de Diakina Fofana, cuyo cadáver arrojaron a un pozo, aunque aseguran que fue de forma accidental
PATRICIA JIMÉNEZ. Jumilla
A petición propia, los cuñados hondureños acusados de matar a Diakina Fofana, han prestado nuevamente declaración en el Juzgado de Jumilla para cambiar su declaración y confesar que ambos acabaron con la vida del hombre aunque, aseguran, fue de forma accidental. El cuerpo de Diakina fue hallado en un pozo tras 53 días desaparecido.
Los dos jóvenes se han vuelto a sentar ante la jueza de Instrucción número 1 de Jumilla para explicar que riñeron con Diakina, que habían consumido sustancias estupefacientes y que no había razón previa. Ignacio Guerrero es abogado de Junior y Fermín Guerrero defiende a Bayro.
En su primera declaración, los jóvenes se acusaron mutuamente. Sus abogados justifican que fueron presas del miedo por las consecuencias de sus actos y hoy han cambiado su versión: fue una acción conjunta y accidental.
Así, los dos cuñados de 22 y 23 años han regresado a la cárcel de Sangonera donde ingresaron el 27 de octubre en prisión provisional, comunicada y sin fianza.
