El colectivo Murcia Lab recuerda que el vehículo privado es una de las principales fuentes de contaminación en las ciudades y pide el fomento del transporte público dando prioridad absoluta al peatón
Vecinos del barrio del Carmen de Murcia y de otros colindantes se concentraban este jueves en el Puente Viejo para reivindicar que no se reabra al tráfico privado, tal y como ha anunciado el alcalde de la ciudad, José Ballesta.
Convocada por la Asociación MurciaLab, a la protesta se sumaban una veintena de colectivos, que rechazan la decisión adoptada por el alcalde, José Ballesta, de dar marcha atrás al plan de movilidad del anterior gobierno municipal socialista por el que este puente, tras las obras, sólo podrían pasar autobuses, bicis y otros vehículos de movilidad personal, como patinetes y motos eléctricas.
Los convocantes leían un manifiesto y anunciaron que se reunirán la próxima semana con el concejal de Movilidad, José Francisco Muñoz, a petición de ellos.
La concentración estuvo apoyada por la Asociación de Vecinos Carmelitanos, Asociación de Vecinos Ermita del Rosario, Asociación de Vecinos de Vistabella, Asociación de Vecinos de Barriomar-La Purísima, Asociación de Vecinos de Santiago el Mayor, FAVEBAPE (Federación de Asociación de Vecinos de Barrios y Pedanías), Bicibús El Carmen, FAPARM, Tudmur, Murciaenbici y Murcia Huerta Viva.
Así como Ecologistas en Acción Región de Murcia, Plataforma ProSoterramiento, Asociación de Usuarios de la Sanidad, Stop Quemas, Bicue Cartagena, Madres por el Clima Región de Murcia, Colectivo Jurídico Pro Cives, Asociación de Vecinos y Amigos del Malecón y su Huerta, Asociación de Vecinos San Pío X y Marea Blanca.
Uno de los portavoces de la convocante Murcia LAB, José Rodríguez, recuerda que el vehículo privado es una de las principales fuentes de contaminación en las ciudades.
Cuando en 2014 se estaba estudiando el tráfico por el Puente Viejo para una posible implantación del tranvía ya se detectó el paso de unos 12.500 coches diarios. Hoy las cifras serían mucho mayores.
José Rodríguez dice que hay varias soluciones posibles, pero que todas pasan por fomentar el transporte público y dejar la prioridad absoluta al peatón.