El secretario general de la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos, Marcos Alarcón, dice que " estamos reclamando en torno a la ganadería que se avenga la industria integradora a negociar un contrato homologado"
En el balance agrario de la Unión de Pequeños Agricultores sobre este 2023 destacan la pérdida de renta de las familias que se dedican al sector primario debido no solamente al incremento de los precios sino por las inclemencias climáticas con un invierno con altas temperaturas, con reducción generalizada de producciones por escasez de lluvias. Los altos costes, decía su secretario general, Marcos Alarcón, condicionarán la disponibilidad de alimentos en el futuro.
Citaba como uno de los cultivos mas afectados el tomate por la competencia de las producciones de Marruecos y los efectos meteorológicos adversos. Y es que, decía Alarcón, el cambio climático ha venido para quedarse con periodos cada vez más amplios de sequía, seguidos de lluvias torrenciales muy perjudiciales para el sector.
En Ganadería, vienen padeciendo año y medio los altos precios de las materias primas empleadas para la fabricación de piensos, a lo que se suma el encarecimiento de los forrajes.
En el ámbito sanitario, para el sector de los rumiantes, preocupa la aparición de focos de la enfermedad de la lengua azul en la Región de Murcia pese a que son pocos los focos detectados y no afecta a la salud de las personas. Al ser declarada zona restringida Murcia, los países receptores de estos animales pueden establecer condicionantes sanitarios que limiten o incluso impidan la exportación.
