Juan José Vera, defensor del universitario en la Universidad de Murcia, explica que la Universidad de Murcia es una comunidad amplia, formada por más de 30.000 personas que refleja el sentir de la sociedad
La conflictividad interpersonal aumenta en la Universidad de Murcia. Así se pone de manifiesto en la memoria del curso 2022/2023 del defensor universitario que se presentó este martes. En la mayoría de casos no se trata de asuntos graves, pero desde este departamento advierten que la crispación y la polarización social tiene su reflejo entre la comunidad universitaria.
En el curso 22/23 la oficina del defensor universitario tuvo aunque atender 391 casos, convirtiéndose así en el tercer curso con mayor conflictividad de la última década, aunque la gravedad de los asuntos tratados no tuvo demasiada trascendencia.
Llama la atención el capítulo de los conflictos por el comportamiento de estudiantes, profesores y los llamados conflictos interpersonales que ha experimentado un evidente aumento en la universidad murciana. En total, en estos tres epígrafes, la oficina ha tenido que atender 73 casos explica Juan José Vera, defensor del universitario en la Universidad de Murcia
Vera explica que la Universidad de Murcia es una comunidad amplia, formada por más de 30.000 personas que refleja el sentir de la sociedad. Señala que es preciso mejorar los sistemas de resolución de conflictos porque la percepción es que estamos perdiendo las formas de relacionarnos. Por eso ve necesario marcar una pauta que mejore la forma de comunicarnos entre nosotros.
Al margen de esta cuestión, la mayoría de intervenciones de este órgano de mediación siguieron siendo los asuntos relacionados con la evaluación. Profesores que cambian la forma de examinar sin previo aviso o de alumnos que no entienden las obligaciones que entraña una asignatura. Casos que, en la mayoría de ocasiones, se llegan a solucionar a través de esta oficina.
