El consejero de Hacienda, Luis Alberto Marín, asegura que la ministra rechazó iniciar la reforma alegando que las posiciones de las comunidades “son de máximos” y apelando a supuestas diferencias entre comunidades
Decepcionante y estéril. Así califica el consejero de Hacienda, Luis Alberto Marín, la reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera. Y lo hace por varios motivos: porque no se ha desvelado ningún detalle sobre la reforma del modelo de financiación autonómica; no se ha desvelado las entregas a cuenta para cada comunidad; no se ha aceptado la propuesta de las autonomías gobernadas por el PP de modificar el reglamento de votación de este organismo; y el déficit autorizado es insuficiente.
Marín se queja de que, pese a que el orden del día de este encuentro incluía un punto en el que el ministerio se comprometía a exponer la posición del Gobierno central sobre la financiación finalmente, decía, María Jesús Montero, no ha ofrecido datos alegando posiciones de máximos y diferencias entre los distintos territorios. La Región de Murcia volvía a plantear la puesta en marcha de un fondo transitorio de nivelación mientras no se produzcan cambios.
Quejas también del consejero por el déficit permitido por el Ejecutivo central. Considera que el reparto es injusto porque las comunidades tienen descentralizado más del 35% del gasto total pero sólo participan del 4% de esa capacidad.
El Ministerio de Hacienda, según explicaba Luis Alberto Marín, ha rechazado debatir la propuesta de las comunidades gobernadas por el PP para modificar el reglamento de funcionamiento del Consejo y buscar un sistema más equilibrado y justo.
Cabe recordar que el rechazo a la propuesta de María Jesús Montero en 2016 vino precisamente de un gobierno del Partido Popular. Pese a las desavenencias, el consejero de Hacienda mantiene la mano tendida para conseguir un nuevo modelo de financiación.