El Gobierno venezolano detuvo a dos turistas españoles por su supuesta relación con el Centro Nacional de Inteligencia, declaraciones desmentidas por el Gobierno español
El Gobierno de Venezuela hizo pública este sábado la detención de dos españoles por su presunta implicación en una supuesta operación con fines "terroristas", entre ellos asesinar a Nicolás Maduro y "suministrar mercenarios" para un supuesto operativo dirigido por Estados Unidos. España, desde el Ministerio de Exteriores, ha desmentido que esté implicada en una "operación de desestabilización política".
Venezuela argumenta que los detenidos tienen relaciones con el Centro Nacional de Inteligencia (CNI), según declaraciones de Diosdado Cabello Rondón, ministro de Relaciones Interiores, Justicia y Paz de Venezuela. El Gobierno de España ha desmentido que formen parte de ese ni de ningún otro organismo estatal.
Los detenidos son los bilbaínos Andrés Martínez Adasme y José María Basoa Valdovinos, de 32 y 35 años, respectivamente. Según sus familiares, ambos estaban en el país como turistas y el pasado 9 de septiembre denunciaron su desaparición ante la Ertzaintza y en redes sociales. Aunque la Policía averiguó que habían sido detenidos, no se le indicó el motivo y la investigación por la desaparición sigue abierta. Además,
La Embajada de España en Venezuela ha pedido al Gobierno de Maduro tener acceso a los dos detenidos, acusados de terrorismo, para verificar sus identidades y darles la asistencia necesaria. Sus familias están en contacto permanente con el Ministerio de Exteriores y el Consulado de España en Caracas, además de con el Gobierno vasco.
Horas después, Josep Borrell, el Alto Representante de la Política Exterior de la UE, ha calificado de "régimen dictatorial" al Gobierno de Venezuela al recordar a los los "más de 2.000 detenidos", los "siete millones" de emigrantes y los dirigentes opositores exiliados, entre quienes se encuentra el opositor Edmundo González, que se encuentra en España bajo asilo político.
"En Venezuela hay más de 2.000 personas detenidas arbitrariamente después de las elecciones. El líder de la oposición ha tenido que huir. Los partidos políticos se han sometido a mil limitaciones en su actuación. Hay 7 millones de venezolanos que han huido de su país. Bueno, usted a todo eso, ¿cómo le llama?", ha argumentado Borrell en declaraciones a Telecinco.
Con su crítica, Borrell se ha unido a voces como la de Margarita Robles, ministra de Defensa. "Recuerdo a los hombres y mujeres de Venezuela que han tenido que salir de su país, precisamente por la dictadura que viven", declaró la ministra durante el acto de presentación de una novela.
En respuesta, el ministro de Relaciones Exteriores de Venezuela, Yván Gil, ha calificado a Borrell de "vocero del mal" y ha asegurado que está en "el basural de la historia". "Una retirada de la política con las manos manchadas de sangre, doblemente fracasado en sus intentos por dañar al pueblo venezolano, inventando gobiernos ficticios (Guaidó 1.0 y 2.0) y sobre todo convirtiendo a la Unión Europea en una institución decrépita, colonialista y guerrerista", ha afirmado.