La falta de alquileres 'pet friendly', la mala información sobre la nueva Ley de Bienestar Animal y la escasez en sus recursos han provocado el desborde de las protectoras
El problema de la vivienda también está afectando a las mascotas. Cada vez son más las personas que se ven obligadas a entregar a sus animales a las protectoras porque encuentran dificultades con los propietarios a la hora de firmar un contrato de alquiler. Muchas viviendas de alquiler no aceptan animales y eso convierte a perros y gatos en víctimas indirectas de la crisis de acceso a la vivienda.
A esta situación se suma la incertidumbre generada por la Ley de Bienestar Animal. Una norma que, aunque busca proteger a perros, gatos y otras especies, ha provocado un efecto no deseado: el miedo de muchos dueños a no poder afrontar los gastos que supone el cuidado de sus mascotas. Ante la duda de no poder cumplir con las nuevas obligaciones, algunos prefieren entregarlas a las protectoras, señala Javier Rodellar, presidente de la Asociación Nacional Española de Protección y Rehabilitación Animal (ANERPA).
El resultado es que las asociaciones están completamente desbordadas. Ya no es solo en los meses de verano, cuando tradicionalmente se disparaban los abandonos, sino durante todo el año. Los refugios se ven incapaces de dar respuesta a un goteo constante de entradas que no para de crecer. Una situación que, según Rodellar, afecta a todas las protectoras, no solo a ANERPA.
A todo ello se suma la falta de recursos. Los ingresos que reciben de particulares y empresas resultan insuficientes, mientras que las ayudas públicas llegan a cuentagotas. Algunas administraciones, las menos, firman convenios con las protectoras, como es el caso de ANERPA con el Ayuntamiento de Alguazas. Otros consistorios directamente contratan servicios de recogida de animales, pero esta fórmula, en muchos casos, acaba en fracaso al quedar impagados los servicios prestados, lo que agrava todavía más la situación, advierte Andrés Salar, presidente de la protectora El loco de los perros.