Es el primer cara a cara entre ambos mandatarios desde el año 2019 en Japón. Trump ha sugerido que habría un "intercambio de territorios" en un futuro acuerdo de paz
La cita entre Donald Trump y Putin ya tiene fecha y lugar, será el 15 de agosto en Alaska para buscar una solución a la guerra en Ucrania
También ha sugerido que habría un "intercambio de territorios" en un futuro acuerdo de paz entre Rusia y Ucrania. Trump, quien ha prometido en varias ocasiones poner fin a este conflicto, ha hablado varias veces por teléfono con su homólogo ruso en los últimos meses, pero aún no se han visto en persona desde que regresó a la Casa Blanca en enero.
El lugar del encuentro es un terreno neutral, en el vasto y salvaje estado de Alaska, en el extremo noroeste del continente americano y cerca de Rusia, un territorio que este último cedió a Estados Unidos en el siglo XIX. Será el primer cara a cara entre ambos líderes desde junio de 2019 en Japón, un año después de una cumbre en Helsinki donde Donald Trump adoptó un tono muy conciliador con el hombre fuerte del Kremlin. Putin no ha pisado suelo estadounidense desde 2015, durante la presidencia de Barack Obama.
Trump ha reconocido que le habría gustado verse antes con el mandatario ruso, pero ha apuntado que las cuestiones de seguridad pueden haber demorado las gestiones para organizar la cita.
El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, ha insistido este sábado en que no cederá territorio ucraniano a Moscú y ha criticado que se deje de lado a Kiev en el proceso de negociaciones de paz
El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, ha comenzado este sábado una ronda de contactos con líderes europeos, entre ellos el presidente francés, Emmanuel Macron, y el primer ministro británico, Keir Starmer, para tratar la situación de la guerra con Rusia tras conocer la próxima reunión entre Donald Trump y Vladimir Putin el 15 de agosto en Alaska (EEUU).
Zelenski también ha confirmado conversaciones con la primera ministra danesa, Mette Frederiksen, y el primer ministro estonio Kristen Michal, a quienes ha transmitido su misma postura de rotunda negativa ante las informaciones que hablan de una posible paz en Ucrania si Kiev admite el control ruso sobre los territorios incorporados por Moscú en el este del país o, como dijo el presidente ucraniano, "el peligro que representa el plan de Rusia de reducir todo a discutir lo imposible".