En busca del petricor. Coy, corazón rural de Lorca
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COY, CORAZÓN RURAL DE LORCA
Entre telares y viñedos por las Tierras Altas de Lorca
En Lorca, contamos con las pedanías llamadas “Tierras Altas de Lorca”, una denominación que indica su perfil montañoso, rústico y silvestre en comparación con otras partes de la Región de Murcia. Lorca es uno de los municipios más extensos de España y Coy se sitúa como una de sus pedanías más septentrionales, a unos 40 kilómetros al norte de la Ciudad del Sol.
La pedanía de Coy limita con Mula y Cehegín, se encuentra a una altitud de 858 metros sobre el nivel del mar. El origen de su nombre podría derivar de colina en latín (collis) por su elevación, pero también por el asentamiento de sacerdotes judíos de la diáspora (cohen, cohanim), cuya voz local dio “cohiim” derivando a Coy.
El protagonismo de Coy hoy en el capítulo 28 de “En busca del petricor” se debe a sus numerosos valores culturales y naturales, entre los que se cuentan:
• Yacimientos
o El cerro de Las Viñas (Neolítico y poblado argárico de la edad de Bronce)
o La Fuentecica (necrópolis íbera)
o La Tejerica, El Villar y El cerro del Calvario (cerro de Coy) y su poblado tardo-romano
• Altiplano de Coy, nacimiento del río Turrilla, afluente del Guadalentín.
• Playa fluvial acondicionada.
• Minas de plomo y plata, que fueron explotadas hasta el agotamiento en el siglo XVIII.
• Un oasis de tradiciones como la fabricación de jarapas y vino artesanal.
Además, Coy fue zona fronteriza del Reino de Granada tras la Reconquista y contó con un castillo, que posteriormente fue destruido. En el siglo XVIII, Coy era el tercer núcleo poblacional más importante del municipio tras Lorca y Puerto Lumbreras. Hoy día, Coy nos sigue maravillando por su entorno natural, su cultura e historia, convirtiéndola en un enclave idóneo para potenciar el ecoturismo.
