El tenista murciano derrota a Grigor Dimotrov en dos sets (6-4 y 6-4) y alcanza las semifinales del torneo de Londres. Este sábado jugará contra Korda (hacia las 16 horas, Movistar, dial 59)
GREGORIO LEÓN
La asombrosa velocidad de quemar etapas, su innata capacidad de aprendizaje, de aprehender conceptos, ha colocado a Carlos Alcaraz en las semifinales del exigente torneo de Queen's, logrando su mejor actuación en hierba hasta el momento. El murciano se enfrentaba a un especialista en esa superficie, el búlgaro Grigor Dimitrov, que llegó a acariciar una final en Wimbledon, cuando parecía que estaba preparado para discutir el totalitarismo ejercido por The Big Three. Pero el murciano, con el tenis cada vez mejor, lo ha dejado también tirado en el camino.
Alcaraz enseñó ya los dientes en el primer juego, con un break que era una señal de aviso para Dimitrov. Incluso en los momentos más delicados, salvó el murciano hasta tres bolas de quiebre, y el set no se le escapó. Imposible que tal cosa ocurriera, con un porcentaje de un 80 por 100 de puntos ganados con su primer servicio. Sí. Carlitos es cada día más tenista, puliendo hasta los defectos que ofrecía su juego, como el servicio. Hasta en eso se ha convertido en un jugador inabordable.
Dimotrov ofreció un recital en los tres primeros juegos del segundo parcial. Valiéndose de su fiabilidad al saque, parecía construir sólidamente el triunfo en este set. Pero Alcaraz tiene soluciones ante cualquier situación sobrevenida. Siempre tiene a mano un paraguas cuando diluvia. O un buen abrigo cuando las temperaturas bajan de cero. Y con una secuencia de cuatro juegos consecutivos, a golpe de winner, volteó la situación. Y cerró el partido con su servicio. Impecable Carlitos, ya en semifinales del torneo londinense.
Su próximo rival será el estadounidense Sebastian Korda, en un partido que comenzará este sábado hacia las cuatro de la tarde.