Los murcianos no quieren pensar en el largo plazo porque, a su juicio, les perjudica. Pablo Larrea confiesa que al equipo le cuesta ganar fuera de casa y que deben mejorar el balón parado y la efectividad en ataque
Pablo Larrea está viviendo una temporada llena de pesadillas por las lesiones. Frustrado por haber jugado 40 minutos en los últimos siete partidos, el centrocampista quiere sumar al equipo para acercar al Real Murcia al playoff. Son siete puntos de distancia a falta de diez partidos, por lo que en el partido de este fin de semana "nos jugamos mucho. Se tiene que ver sobre el campo". Para Larrea, "este partido marca el devenir de la temporada".
Con una victoria en los últimos cinco partidos, los murcianos están "perdiendo oportunidades. Hay que afrontar cada partido como si fuese el último", afirma el exjugador del Tenerife con "ganas de llevarnos los tres puntos". Este fin de semana, los pimentoneros se medirán al Atlético Sanluqueño en tierras andaluzas. Una de las premisas para ganar el partido, según Larrea, es la concentración: "Debemos estar concentrados, sin regalar nada porque todos los equipos te pueden penalizar".
Pablo Alfaro ha vivido los últimos dos partidos sobre la grada y, para el centrocampista, se hace notar, aunque esto no puede ser determinante: "No marca el resultado". Una de las pretensiones del Murcia es dejar el largo plazo a un lado, con el fin de marcar, paso a paso, el camino correcto hacia una buena dirección: "Estamos comprometidos con la causa". Para que el Real Murcia llegue al ansiado playoff, Pablo Larrea tiene claro los aspectos a corregir: "Defensivamente somos férreos, nos encontramos cómodos en bloque medio, pero tenemos que mejorar el balón parado y ser efectivos arriba. No tenemos muchas ocasiones y tenemos que aprovecharlas".