El presidente del Real Murcia, con lazos en el mercado internacional, se propone contratar jugadores con proyección que puedan desarrollarse en la cantera grana. El club, ya sin deuda pública, podrá fichar con libertad.
GREGORIO LEÓN
El Real Murcia ya es libre. Es cuestión solo de unos pocos días (quizá el lunes) que tenga en su mano el certificado de estar al corriente con la Agencia Tributaria. La primera consecuencia directa de esta noticia es que el club queda completamente a resguardo de cualquier riesgo de liquidación, que ha penduleado sobre la cabeza del club desde hace más de una década. Pero hay otros efectos positivos que se derivan de la cancelación total de la deuda con Hacienda. Uno de ellos es que se le abre el mercado internacional a la entidad grana. Felipe Moreno sigue recetas antiguas, aquellas que le han dado resultados en otras etapas de su vida. Y el Leganés realizó varias operaciones exitosas que dejaron en caja una cantidad de 77 millones de euros. Comprar barato, vender caro. Es la única forma de subsistencia y viabilidad futuras para un club como el Murcia, sometido a oscilaciones en alta mar. No es un trasatlántico como el Madrid, el Barça, el Atleti... Garbillar el fondo del río para encontrar una pepita de oro resplandeciente de futuro. El "método Leganés" funciona.
Felipe Moreno, que ya lleva unos años descubriendo los secretos del fútbol, ha creado alianzas internacionales. Sus contactos se extienden por América y África. Son frecuentes sus viajes a Ghana. Y el martes va a emprender uno diferente. Va a ser la primera vez que vuele a Brasil ya con su club liberado, con las manos desatadas para fichar futbolistas de categoría internacional. No será necesaria la intercesión de un equipo-puente (Mazarrón, por ejemplo), sino que el Real Murcia ya tendrá plenas facultades jurídicas y económicas para fichar, con su nombre, un jugador.
El presidente del Real Murcia tiene previsto celebrar varias reuniones. Y la idea es captar jugadores en expansión de los principales clubes de Brasil, aquellos con los que tiene puentes tendidos después de varios viajes y largas estancias. Futbolistas que puedan proyectarse en el fútbol español, bajo la protección de una entidad de linaje como el Real Murcia, con ficha del filial pero con participación en los entrenamientos del primer equipo para que desarrollen todas sus capacidades.