Cayó en Palma (6-3) por su falta de acierto y fallos inusuales. Mantuvo el tipo hasta el inicio de la segunda parte pero luego se encadenaron los despropósitos. Debutó Osamanmusa. Waltinho no viajó al fracturarse la mano
El Jimbee Cartagena sumó en Palma su primera derrota de la temporada. Perdió por 6-3 en un partido marcado por la falta de acierto visitante y errores puntuales que se encadenaron especialmente en la segunda mitad. Un cúmulo de despropósitos que se aunaron para que el equipo de Duda perdiera después de medio año invicto.
El primer golpe fue la lesión de Waltinho el lunes, una fractura en la mano tras una jugada fortuita en un entrenamiento. Eso provocó que Osamanmusa tuviera que jugar en Palma con apenas un entrenamiento. El tailandés dejó detalles pero no acompañaba la noche para lucirse. Encima Mellado tampoco saltó a la pista por culpa de sus molestias en el pie. Con ese panorama arrancó un partido igualado en el que el Jimbee iría cayendo poco a poco.
Barrón estuvo acertado en los primeros envites cartageneros. Sin embargo el primer tanto fue local cuando Gordillo le ganaba la partida a Jesús Izquierdo. Supo empatar con Castejón por la vía rápida. El partido estaba vivo todavía. Sin embargo, en el minuto 14, un robo de balón y una contra supuso el 2-1 de Bruno Gomes.
Motta firmó la igualada nada más salir de vestuarios. Había partido. Pero el tercer tanto de Palma, obra de Neguinho tras una gran triangulación, hizo mucho daño. El Jimbee fallaba cada vez más y las oportunidades del cuadro balear comenzaban a amontonarse. Chemi, un seguro habitual, falló en el 4-2 y con el partido roto Palma pudo marcar varios goles. Llegarían dos más, uno de Machado y un rebote de Neguinho en el centro del campo que se convirtió en una vaselina preciosa. Con 6-2 Duda introdujo a Tomaz como portero jugador pero la fórmula no funcionó. Fabinho envió un doble penalti al palo y Darío Gil maquilló con el 6-3 ya en el último suspiro. No era la noche del Jimbee. Casi sin descanso, este viernes (21:00 horas) tendrá un nuevo partido en Pamplona, ante Osasuna, para quitarse el mal sabor de boca de Son Moix.