Pese a que dominó gran parte del encuentro y que supo igualar con gol de Morata el tanto de Chiesa durante el tiempo reglamentario, los errores de Dani Olmo y el propio Morata desde los once metros le dejan sin la final
JOSÉ A. VERA
España quedó eliminada de la Eurocopa tras sucumbir ante Italia en la tanda de penaltis. Fue muy superior con balón el equipo de Luis Enrique, pero golpeó primero Chiesa para el conjunto de Mancini. Morata, que hizo la igualada en el tiempo reglamentario, fallaría después un lanzamiento de pena máxima (al igual que Dani Olmo previamente) que valdría el pase a Italia a la final del domingo frente al vencedor del Inglaterra-Dinamarca.
La propuesta sorprendente de Luis Enrique, sin Morata ni Gerard Moreno como referentes en ataque, permitía a La Roja presionar arriba en los primeros minutos de partido y hacerse dueña del balón. Sin embargo, los primeros sustos los daría Italia, con un disparo al palo de Barella (anulado por fuera de juego) y una mala salida de Unai Simón que no pudo aprovechar el propio jugador de la 'Azzurra' minutos después. Entre medias, Pedri colaba un pase a Oyarzabal, pero el atacante de la Real Sociedad no podía controlarlo. La ocasión más clara llegaría en las botas de Dani Olmo, cuyo disparo en el área blocaba con una gran estirada Donnarumma. Corría el reloj y el guion se mantenía, España quería la pelota e Italia se mostraba dispuesta a aprovechar cualquier descuido del equipo de Luis Enrique. El dominio era total, pero faltaban los chuts a puerta. Al filo del descanso, en una buena acción trenzada por Italia, un pase largo a Insigne acababa con Emerson enviando el balón al larguero del marco de Unai Simón.
A la salida de vestuarios, el partido ganó en emoción con los primeros compases. Di Lorenzo evitaba que un centro de Dani Olmo lo rematara a placer Ferran Torres y acto seguido Busquets disparaba alto desde la frontal y Unai Simón tenía que atajar a la contra un buen chut raso de Chiesa. No perdonaría el delantero italiano a la contra. Laporte evitaba el primer chut azzurro pero en el rechace Chiesa firmaba el primer gol tras un tiro con parábola, lejos del alcance de Laporte.
Después de unos minutos aturdida, la selección española asediaba el área de Donnarumma pero Oyarzabal no lograba cabecear en el área pequeña una magistral asistencia de Koke ni tampoco después Dani Olmo, con un disparo desde la frontal que se iba desviado, era capaz de empatar. Todos esos riesgos permitían a Italia hacer daño a la contra y Unai Simón tenía que sacar bajo palos un disparo raso de Berardi. Luis Enrique mandaba al equipo al ataque y colocaba en el campo a Morata y a Gerard Moreno para tener más presencia ofensiva.
Con las prisas y los nervios, España se mostraba más imprecisa y Berardi marraba desde la frontal el segundo para los italianos. El que perdona la paga suele decirse en el argot futbolístico y en la siguiente jugada una triangulación de clase culminaba con Olmo habilitando a Morata dentro del área y haciendo éste el empate tras batir a Donnarumma a diez minutos para el final del tiempo reglamentario. España se crecía y en el siguiente saque de esquina Busquets casi daba forma a la remontada con su remate de cabeza. En otra contra, con Morata de protagonista, asistía a Gerard y éste se enredaba en la frontal. El reloj corría y el destino deparaba otra prórroga, la tercera consecutiva para los de Luis Enrique.
Ya en el tiempo extra, España era clara dominadora. Se jugaba la primera parte de la prórroga con Italia metida atrás y Donnarumma evitando dos ocasiones con Busquets y Llorente de protagonistas. A la escuadra de Mancini le favorecía la llegada de ese nuevo intermedio para coger aire. Laporte evitaba que un contragolpe italiano acabase en gol nada más reanudarse el choque. Berardi marcaba, pero el tanto era anulado por claro fuera de juego. España veía como su rival se adelantaba unos metros en el campo gracias a los cambios. El cansancio hacía mella y a los equipos, ya faltos de chispa, les bastaba con asegurar (salvo algún chispazo aislado como la contra que Pau Torres abortaba cortando de tacón la ofensiva azzurra) y no correr riesgos excesivos hasta la decisiva tanda de penaltis. En ella, Unai Simón daba esperanzas al atajar el chut de Locatelli, pero Dani Olmo lanzaba el balón fuera. Goles consecutivos de Belotti, Gerard, Bonucci, Thiago, Bernardeschi... hasta el fallo de Morata que ponía en bandeja el triunfo a un Jorginho que no perdonó.
FICHA TÉCNICA
ITALIA: Donnarumma; Di Lorenzo, Bonucci, Chiellini, Emerson (Tolói 72'); Barella (Locatelli 84'), Jorginho, Verratti (Pessina 72'); Chiesa (Bernardeschi 106'), Inmobile (Berardi 60') e Insigne (Belotti 84').
ESPAÑA: Unai Simón; Azpilicueta (M. Llorente 84'), Eric García (Pau Torres 108'), Laporte, Jordi Alba; Koke (Rodri 69'), Busquets (Thiago 105'), Pedri; Oyarzabal (Gerard Moreno 69'), Dani Olmo y Ferran Torres (Morata 60').
GOLES: 1-0 (59') Chiesa. 1-1 (79') Morata.
PENALTIS: 0-0 Locatelli (para Unai), 0-0 Dani Olmo (fuera), 1-0 Belotti (gol), 1-1 Gerard Moreno (gol), 2-1 Bonucci (gol), 2-2 Thiago (gol), 3-2 Bernardeschi (gol), 3-2 Morata (para Donnarumma), 4-2 Jorginho (gol).
ÁRBITRO: F. Brych (alemán). Amarillas a Busquets (50'), Tolói (96') y Bonucci (117').
ESTADIO: Wembley.
