El preparador físico del tenista murciano destaca su predisposición al trabajo. Alcaraz prepara el inicio de año en el Open de Australia a partir del 16 de enero
GERMÁN ABRIL / FERMÍN NOAIN
Carlos Alcaraz ultima su puesta a punto para la nueva temporada con la responsabilidad de defender su condición como líder del ranking ATP. El tenista de El Palmar abrirá el año en el Open de Australia y antes solo jugará el torneo de exhibición de Kooyong, en Melbourne. El murciano viajará a Australia el próximo 7 de enero.
Alberto Lledó, preparador físico de Alcaraz, recuerda que "en el tenis dependemos siempre del calendario, hay que estar en plenas condiciones ya al principio del año porque tenemos muy pronto el primer Grand Slam, las pretemporadas en este deporte suelen ser cortas, hay que buscar los picos de forma en los cuatro Grand Slam, pero en tenis si no compites en otros torneos y no ganas no sumas puntos y por eso el pico de forma tiene que estar casi siempre alto, hay que buscar el equilibrio".
Lledó cree que en la condiciones de Carlos Alcaraz "hay una pequeña parte genética, pero sobre todo viene condicionado por la calidad del trabajo gracias a que Carlos está predispuesto a ello". Otro de los objetivos del equipo de trabajo es crear el contexto para que el tenista murciano se sienta cómodo: "Se trata de que él sepa que el equipo está para lo que necesite, somos flexibles para ayudarle lo que podamos en las condiciones que podamos".
El preparador físico de Alcaraz destaca que el jugador no ha cambiado por su condición de número uno: "Carlos es el de siempre y lo agradecemos, es difícil aceptar el rol de número uno y la generación mediática que supone, quizá le costó un poco pero no tras ser número uno sino después de ganar el Masters 1.000 de Madrid, se trata de asimilar el nuevo estatus social y deportivo, con el tiempo ya lo ha interiorizado, Carlos no ha cambiado nada".
