El equipo grana derrota al Sabadell en el estadio Nueva Condomina-Enrique Roca, y se ubica tercero, a solo dos puntos del líder
GREGORIO LEÓN
El Real Murcia se ha hecho de mármol en el estadio Nueva Condomina-Enrique Roca para emigrar hacia la zona más caliente de la clasificación. Las zozobras y desasosiegos son cosa del pasado. El equipo que adiestra Mario Simón presume de una secuencia de tres victorias consecutivas. Este domingo, a lomos de la vieja guardia, de futbolistas que vienen de la Segunda RFEF como Armando, Andrés Carrasco y Santi Jara, le dio una alegría a sus aficionados. El resultado le da la razón al entrenador grana, que hizo hasta siete mutaciones en la alineación. La revolución le salió bien.
El conjunto murcianista hostigó al rival en el primer tiempo. Si Miku hubiera estado fino, se habría alterado el marcador. Pero el descanso dejó un 0-0 abierto para la continuación. Y ahí, sí, el Murcia pudo franquear la puerta a la que estuvo llamando desde los primeros minutos. Santi Jara definió el 1-0. Y Armando, con una jugada explosiva, le regaló un caramelo a Andrés Carrasco, que hizo un gol canónico de delantero centro, marcando los tiempos, conectando un cabezazo imparable.
El Sabadell no había dicho su última palabra. Juanmi Carrión aprovechó una falta al borde del área. El 2-1 llevó la inquietud a las gradas. La paz regresó con el gol de Alberto González, que encontró un centro preciso de Santi Jara, el futbolista más distinguido de los grana.
