El Mar Menor ha pedido por el extremo una cantidad desproporcionada, según se entiende en las oficinas del Real Murcia.
GREGORIO LEÓN
El Real Murcia tiene aún cartas escondidas en el mercado de invierno. Pero algunas ya las ha enseñado. Una de ellas es Loren Burón. La dirección deportiva no ha escondido el interés que suscitaba el jugador del Mar Menor, por el que también ha entrado en puja el Águilas. El club de San Javier no quiere descapitalizarse deportivamente, y su oposición a que el extremo se marchara a El Rubial era frontal. No han gustado en la entidad del Pitín algunos procedimientos usados por el club que preside Alfonso García. Más inclinado parecía a emprender una negociación con el Real Murcia. Pero a las oficinas del estadio Nueva Condomina ha llegado una petición económica desde el Pitín que, a juicio de los responsables murcianistas, es exorbitante.
El club que preside Agustín Ramos sí estaba dispuesto a pagar una cantidad considerable por Loren Burón, pero sin llegar los 30.000 euros que figuran en su cláusula de resolución. La propuesta formulada desde el Mar Menor ha sorprendido en el Murcia, que ha trenzado una relación fluida con el equipo azulón, potenciado por el trasvase de Silvente y Guille Lozano, salidos de la casa grana.
Las posibilidades de que Loren Burón acabe corriendo por la banda del estadio Enrique Roca, en consecuencia, quedan claramente limitadas. De momento el aficionado no tiene ningún fichaje que echarse a la boca, salvo Manu Pedreño.
