El murciano le ha planteado a Luis Rubiales la exigencia de poner en marcha el Mundial de fútbol sala en categoría femenina. El presidente de la Federación Española lo negociará ante UEFA y FIFA.
GREGORIO LEÓN
José Miguel Monje lleva tiempo desdoblándose. Hombre de confianza de Luis Rubiales, no solo debe consagrar su energía en gestionar la Federación Murciana de Fútbol, sino que también trabaja desde junio en el cargo de presidente del Comité Nacional de fútbol sala, por encomienda directa del presidente de la Española. Y desde ese puesto prominente está intentando mejorar las relaciones con la Liga Nacional de Fútbol Sala, y promoviendo nuevos campeonatos. Un déficit histórico es el Mundial femenino de este deporte. Y es uno de sus objetivos. Ya ha dado el primer paso: aprovechando su ascendente sobre Luis Rubiales, le ha planteado la necesidad de darle impulso a este proyecto, para saldar una demanda histórica. Y Rubiales va a celebrar reuniones con responsables de UEFA y FIFA para estudiar la puesta en marcha, por fin, de un Mundial de categoría femenina.
Además, Monje tiene el propósito de que Cartagena acoja la Final Four de fútbol sala, también femenina.
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