Se impuso 65 - 79 al Pinar Karsiyaka en un ambiente hostil. El encuentro duró 3 horas y fue expulsado todo el banquillo del conjunto murciano
REDACCIÓN | EFE
Espectáculo bochornoso el que el UCAM Murcia CB ha vivido en el partido de ida de los cuartos de final de la Basketball Champions League ante Pinar Karsiyaka.
El marcador se rompía en el descanso y el desaguisado duraba 1 hora y 15 minutos; un aficionado empujó a Sadiel Rojas y todo el banquillo universitario fue expulsado. Aun así, el UCAM no se rindió y se llevó el partido con una renta de +14 (65-79). Augusto Lima terminaba el partido con 24 puntos (récord personal) y 7 rebotes, siendo el estandarte del conjunto murciano.
Tras un inicio igualado y ventajas locales hasta el 9-8, el UCAM CB se mostró más entonado en ataque y ello le permitió ir venciendo por siete puntos (11-18) en seis minutos con una tripleta ofensiva activa, pues con seis puntos comenzaron Clevin Hannah, Ovie Soko y Lima.
Esto obligó al serbio Aleksandar Trifunovic, entrenador del Pinar Karsikaya, a pedir su primer tiempo muerto, pero la situación no mejoró para los turcos y el equipo murciano cerró el cuarto con 11 puntos de renta (15-26) y mostrando una gran solidez en las dos partes de la cancha.
En el segundo periodo Lima mantuvo un nivel excelente y en 13 minutos en la pista se fue hasta los 19 puntos, con tan sólo un tiro fallado, y hasta los cinco rebotes. La consecuencia del gran partido del brasileño, que acabó con 24 tantos y 25 de valoración, fue que los de Ibon Navarro vencían por 23-36 en el ecuador de este cuarto a pesar de que Jarrod Jones y David Kennedy, las dos grandes amenazas del rival, trataban de poner la réplica en la otra zona.
La máxima diferencia grana en la primera parte y en el partido llegó coincidiendo con el descanso (30-49) con otro arreón de los universitarios, que llegaron al vestuario para tomarse un respiro con un parcial de 2-10 en tres minutos a favor de un equipo dominante especialmente en el juego interior.
HORA Y CUARTO DE PARÓN POR UNA AVERÍA EN EL MARCADOR
El larguísimo intermedio, que duró una hora y cuarto como consecuencia de una avería en el marcador, determinó el posterior desarrollo del choque, que se jugó sin que funcionara el reloj que determinaba el tiempo de cada posesión y el general se reflejaba en un monitor situado en la mesa.
En esa rocambolesca situación y con los dos equipos fríos, el baloncesto fue muy trabado hasta que el Pinar encontró la vía del triple. Dos canastas de ese valor de Scott Wood, ex del UCAM CB, y una más de Kennedy estrecharon el resultado (51-60), aunque otro triple, éste del grana Álex Urtasun, hizo que los universitarios afrontaran el último periodo por encima de los 10 puntos de ventaja (51-63).
Charlon Kloof, con un nuevo triple y una bandeja, volvió a disparar el tanteo (51-68) y a partir de ahí el último periodo se convirtió en una colección de errores en la pista y de un acciones beligerantes del público, que, viendo que sus jugadores no reaccionaban, la tomaron con el equipo local arrojando objetos a la cancha desde la grada, tales como botellas y hasta una bota militar. Sadiel Rojas se encaró con los hinchas turcos tras ser castigado con una falta antideportiva y después de haber sido empujado por un espectador.
El dominicano vio el camino del vestuario por esa falta y una posterior técnica y Soko, Hannah y Vítor Faverani también por salir en su defensa desde el banquillo.
En ese clima hostil el partido volvió a pararse durante un cuarto de hora cuando faltaban cuatro minutos para la conclusión y la consecuencia fue que el UCAM CB perdió parte de su ventaja hasta el 62-70.
Parecía escaso botín para el buen tono que dieron los de Ibon Navarro, pero un muy buen minuto final, con dos tiros libres y un triple sobre la bocina convertidos por Álex Urtasun situaron la diferencia en unos 14 puntos que valen oro de cara al partido de vuelta, a disputar el miércoles en Murcia y que se presenta interesante y con muchas cuentas pendientes.
