Las personas mayores, niños y trabajadores son los grupos más vulnerables y, por tanto, los que más medidas de prevención deben tomar
REDACCIÓN
Las personas mayores, los niños y los trabajadores son quienes más deben adoptar las medidas preventivas, como bajar las persianas para que el sol no entre directamente a las viviendas o no dejar a una persona en un vehículo estacionado y cerrado. Es recomendable hacer comidas ligeras a base de ensaladas, frutas, verduras o gazpachos para reponer las sales perdidas por el sudor. En cuanto a las bebidas, el Director General de Salud Pública, José Carlos Vicente, aconseja beber agua con frecuencia aunque no se sienta sed, también zumos naturales y no pasarse con las que contienen azúcar, alcohol o cafeína.
La Consejería de Salud insiste en la importancia de extremar la prudencia porque los golpes de calor pueden llegar a provocar la muerte. Una de las principales actuaciones del plan de acciones preventivas que mantiene activo es la elaboración del Índice Diario de Extremos Térmicos.
Los sindicatos también inciden en el mismo sentido.
La responsable del área de Salud Laboral de Comisiones Obreras, Antonia Martínez, recuerda que la prevención es muy importante, porque estas situaciones pueden causar incluso paros cardíacos.
Mantenerse hidratado, cubrirse la cabeza durante la exposición al sol o vestir ropa ligera son algunas de las recomendaciones para evitar que se produzcan ese tipo de situaciones, sobre todo en aquellas personas que realizan trabajos al sol.
Ante cualquier síntoma de golpe de calor, la responsable de Salud Laboral de CCOO recomienda que el trabajador pare la actividad física, repose y se hidrate. Si continúa encontrándose mal, debe acudir a urgencias para que valoren la situación.
Además, Antonia Martínez añade que muchas veces los golpes de calor se dan en sectores precarios en los que prima el trabajo a destajo frente a la salud.