Los aspirantes se han sometido al primer examen tras la incertidumbre de que ha supuesto esta convocatoria histórica de la selectividad
BLANCA CASANOVA. Murcia
Los estudiantes murcianos que se presentan este año a esta convocatoria histórica de la EBAU han subrayado que los centros les han tendido la mano a la hora de poner las notas y han tenido en cuenta la excepcionalidad de la situación. Los alumnos aseguran que la labor de organización durante el confinamiento ha sido crucial a la hora de preparar las pruebas, sin embargo, algunos explican que estudiar en casa ha conllevado estar sometido a muchas distracciones y a la dificultad de resolver dudas de forma telemática. Otros, aseguran que no han contado con tanta ayuda por parte de los profesores y denuncian que, a pesar de las facilidades, han tenido que planificarse de forma independiente.
Para someterse a las pruebas de este llamamiento tan atípico, los aspirantes deben cumplir las medidas de seguridad impuestas debido a la crisis del coronovirus, lo que implica hacer los exámenes con la mascarilla, una medida que pone nerviososos a los estudiantes pero que les resulta 'totalmente entendible'. Entre las nuevas normas de precaución, destaca la colaboración de los estudiantes de la UMU, que durante estos días se convierten en voluntarios con el fin de evitar aglomeraciones en los pasillos de los edificios una vez terminen los exámenes.
Una vez finalizada la primera prueba de la jornada, la de Lengua Castellana y Literatura, los ojos de los estudiantes reflejaban sus caras de felicidad y tranquilidad tras comprobar la facilidad del examen, en el que han caído los temas esperados y el uso de la mascarilla durante la prueba les ha resultado 'pasable'.