La mayoría son vecinos de Murcia que se han quedado sin ingresos. Daniel López explica que han vivido situaciones dramáticas como la de una mujer con su bebé de 6 meses que acudió al centro a buscar comida
REDACCIÓN. Murcia
Unas 350 personas comen a diario en Murcia gracias a Jesus Abandonado, casi 5 veces más que antes del confinamiento. Este lunes la fundación reabre su centro de día y el de formación para las personas sin hogar pero no admitirá ingresos en la residencia para evitar contagios.
Según ha explicado a Onda Regional Daniel López, director de la Fundación Jesús Abandonado, donde más trabajo tienen ahora es en el comedor social que se ha desbordado: ha pasado de 75 usuarios atendidos en un día a 350. El 80 por ciento son vecinos de los barrios de Murcia que se quedaron sin ingresos cuando comenzó el encierro.
Se están viviendo situaciones dramáticas, sobre todo con los padres de familia que buscan comida para llevar a sus hijos. Pero el caso que más conmovió a los trabajadores de Jesus Abandonado fue el de una madre que acudió con un bebé de 6 meses: "que una mujer con su bebé tenga que ir a buscar comida en pleno confinamiento fue una situación bastante dura y dramática. Es un vaivén de emociones, luchamos para que la madre y el bebé tengan la alimentación cubierta, tenían casa para vivir pero no tenían para comer", ha explicado López.
El director de Jesus Abandonado confía en que esto sea una situación puntual para los murcianos. En esta ocasión los inmigrantes se han salvado por la demanda de trabajo que hay en el campo.
En la residencia que Jesús Abandonado tiene en Santa Catalina para los sin techo viven en la actualidad 100 personas; 60 de ellos con discapacidades, que desde este lunes pueden salir una hora acompañados. Nadie puede ingresar para evitar contagios. De momento, no han tenido ningún caso de coronavirus.
