La suciedad que generan da una muy mala imagen a los turistas. Desde al Asociación de Comerciantes piden a las autoridades que tomen cartas en el asunto
ANABEL ARAMENDÍA. Murcia
Los comerciantes de La Manga y Cabo de Palos trasladan a la Delegación del Gobierno su preocupación por los botellones entre los jóvenes. Este año han aumentado por el cierre de locales de ocio nocturnos y están ocasionando muchas quejas entre los veraneantes.
El presidente de la asociación de comerciantes, Antonio Plaza, insiste en la mala imagen que genera entre los turistas la suciedad que queda cada domingo por la mañana en las playas tras los encuentros de jóvenes a lo largo de los 20 km de costa en La Manga y Cabo de Palos.
Antonio Plaza ha trasladado ya la situación al delegado del Gobierno para que tome cartas en el asunto. Los comerciantes van a proponer por ejemplo que se habiliten las explanadas de los locales cerrados cumpliendo todas las medidas de seguridad.
Sobre la situación del Covid en La Manga el presidente de la asociación de comerciantes recuerda que el caso que se presentó hace dos semanas en la madre del propietario de un bar se controló y no fue a más. A día de hoy hay dos personas contagiadas guardando cuarentena.