El alcalde Luengo confía en recuperar la normalidad este miércoles: "Los vecinos están siendo cívicos y entienden la situación. Ojalá la hostelería estuviera ya abierta, pero las tasas son para todos y debemos cumplir"
José A. Vera. Murcia.
El municipio de San Javier vive de forma especial estos días. Cuando habitualmente la primera semana de diciembre tiene un carácter festivo, con el patrón y el puente a continuación, el coronavirus ha aplazado todo. Además, sus bares están cerrados. Según el alcalde, José Miguel Luengo, los vecinos del municipio "han sido cívicos y han estado a la altura, la Policía no ha tenido que intervenir de forma significativa". No se han dado por tanto las conocidas 'No Fiestas', celebraciones particulares fuera de lo permitido, que sí se vieron en otros puntos de la Región. L"as peñas han asumido la situación actual y no han ocurrido percances que lamentar" añadía Luengo.
San Javier es uno de los 5 municipios que aún mantiene la hostelería cerrada. Su incidencia ha bajado ya de los 400 casos por 100.000 habitantes, pero era más elevada cuando se tomó la decisión desde el Comité COVID. Este próximo miércoles, Luengo y los habitantes de San Javier esperan poder disfrutar de los servicios de los bares del municipio: "Ojalá tuviéramos ya los bares abiertos, lo lamento por nuestros hosteleros, pero las tasas están ahí para todos y debemos cumplir con la normativa. No nos queda otra. Por suerte, ya estamos algo mejor".
