La organización relaja los requisitos para poder acceder a los conciertos. El Ayuntamiento trabaja a contra reloj para poder autorizar los 'Warm Up Days'
REDACCIÓN / AGENCIAS. Murcia
El Tribunal Superior de Justicia ha avalado la exigencia de certificado COVID para asistir al WARM y ratifica por tanto la medida exigida a los organizadores por la Consejería de Salud para autorizar la celebración de este evento multitudinario del 8 al 11 de octubre.
En concreto, para la contención y control de la epidemia ocasionada por el virus del SARS-COV-2 en relación con dicho evento, la autoridad sanitaria establece que los organizadores del evento deberán exigir a todos los asistentes mayores de 12 años la presentación de un certificado emitido un centro autorizado que acredite que: han recibido la pauta completa de la vacuna; que disponen de una prueba diagnóstica de infección activa (PDIA) negativa en las últimas 72 horas; que se ha recuperado de una infección por Sars-CoV2.
La organización del festival comunicaba este viernes una relajación de las medidas para acceder a los conciertos, ya que se puede elegir cualquiera de las dos opciones: o el Pasaporte Covid con la pauta completa o certificado de recuperación; o un test de antígenos negativo en las 48 horas anteriores al concierto
Por su parte, el Ayuntamiento de Murcia convocaba de urgencia este viernes a los jefes de los 12 servicios que tienen que emitir informes para que pueda celebrarse el festival WARM UP, cuyos promotores no registraron hasta este jueves 30 de septiembre la solicitud para tramitar la correspondiente autorización.
Así lo ha explicado el concejal de Vía Pública, Juan Fernando Hernández, en la rueda de prensa posterior a la junta de Gobierno, en la que se ha mostrado visiblemente molesto por la falta de diligencia de la empresa que organiza el evento, a la que ya se requirió a comienzos del mes de agosto que presentase la solicitud.
Además, desde noviembre de 2020, cuando la empresa manifestó su intención de hacer el festival, se han mantenido diversos contactos con los organizadores y se han reclamado, tanto por escrito como verbalmente, que se entregase la documentación en el registro electrónico del ayuntamiento.
Sin embargo, la misma no se ha registrado hasta las 10:30 horas de ayer jueves, con apenas una semana de margen hasta la fecha de inicio del festival, y con la petición de comenzar a montar los escenarios en el recinto de la Fica desde hoy mismo, algo que no será posible. “A día de hoy el evento no tiene autorización ni municipal ni autonómica”, ha lamentado.
Para autorizar un evento de estas características, ha recordado el concejal, el Consistorio debe emitir informes favorables de los servicios de Mantenimiento, Limpieza Viaria, Protección Civil, Bomberos, Sanidad, Tráfico, Inspección de Consumo, Medio Ambiente, Ingeniería Industrial, Policía Local y Cultura.
Estos informes no siempre cuentan con la aprobación del correspondiente servicio en primera instancia, sino que en ocasiones se solicita subsanar defectos antes de emitir el informe favorable definitivo.
Una vez recabados todos ellos, hay que remitir cuatro (los relacionados con la cesión de espacios, impacto acústico y ambiental, instalaciones temporales e incidencia sobre el tráfico) a la comunidad autónoma, que también debe autorizar el evento.
La administración tiene un plazo de tres meses para contestar a este tipo de solicitudes, ha advertido, pero hacerlo en apenas unos días precisará de la buena voluntad y trabajo extraordinario en fines de semana y noches por parte de los funcionarios de los servicios afectados.
Hernández ha insistido en que la intención del Ayuntamiento es poder autorizar el evento, ya que se trata de un elemento dinamizador de la vida cultural del municipio, pero ha advertido de que este tipo de comportamientos no pueden generalizarse, por lo que se están estudiando posibles penalizaciones económicas a los promotores de eventos que no registren las solicitudes en tiempo y forma.
El concejal ha reiterado que este proceder no es en absoluto el habitual entre los eventos que acoge la ciudad, muchos de los cuales se comienzan a organizar “de un año para otro” y siempre con el registro oficial de las solicitudes varios meses antes de su celebración.
