Ha zarpado este jueves desde Cartagena con la tripulación vacunada con las tres dosis, tras un riguroso aislamiento, para evitar que el coronavirus vuelva a dejarlos al margen de la campaña de investigación
EVA CABALLERO. Cartagena
La tripulación del Hespérides viaja ya a la Antártida con las tres vacunas y tras un riguroso aislamiento para evitar que el coronavirus vuelva a dejarlos al margen de la campaña de investigación.
Después de que un sargento perdiera la vida el año pasado por Covid, se han extremado las medidas de precaución. Los 60 militares no se quitarán la mascarilla en una semana ni tocarán puerto en Argentina cuando recogan a los científicos. Como explicaba el comandante, Tomás Cordón, bajarán del barco en la ruta de vuelta, dentro de 4 meses.
La contaminación en el océano Austral y la separación de la Antártida de America del Sur centran el trabajo científico que, este año, se extiende al archipiélago de Cabo Verde. Además el Hespérides intentará navegar más al sur del planeta.
Con la burbuja, pocos familiares han despedido al Hespérides. Confían en poder abrazarlos a la vuelta en mayo, dentro de 6 meses. Y los niños planean celebrar la navidad por internet con sus padres desde la Antártida.