En el día Mundial para la Prevención del Suicidio se pone de manifiesto la necesidad urgente de un Plan Nacional que, al igual que en los accidentes de tráfico, consiga disminuir las tentativas de suicidio
MARTA MORENILLA. Murcia
En la Región de Murcia, durante el 2019, último año del que se tienen estadísticas, 125 personas se quitaron la vida, a nivel nacional una persona se suicida cada dos horas y media. Unos datos que ya han superado a las víctimas por accidentes de tráfico. Hoy en el Día Mundial para la prevención del suicidio las asociaciones piden una Plan de Actuación Nacional.
Hasta no hace mucho era tabú hablar del suicidio, hoy en día los medios de comunicación lo hacen de forma abierta para informar de las señales de prevención y de los protocolos de actuación. Desde las asociaciones como la Federación Salud Mental de la Región de Murcia, aseguran que en la prevención está la clave, ya que por cada persona que se suicida, hay 20 que lo intentan. Joaquín Marín es un vecino de Yecla que hace ocho años perdió a su hijo. Un joven que sufría problemas de salud mental, que había estado en tratamiento y que finalmente y sin señales previas se quitó la vida. Joaquín es ahora presidente de la Asociación de Familiares de Enfermos Mentales de Yecla que tiene el objetivo de ayudar a todos los que están pasando por la experiencia que él tuvo que superar. Exigen a la Administración una actuación urgente ya que, aseguran las muertes por suicidio duplican a las muertes en accidentes de tráfico.
Un Plan Nacional de Prevención del Suicidio que está a punto de convertirse en realidad. Loreto Medina, jefa de servicio del Hospital Román Alberca y coordinadora del grupo de trabajo de Prevención de Suicidios del Servicio Murciano de Salud asegura que la actual ministra ya ha dado los primero pasos para que se ponga en marcha, ya está presupuestado y asegura "permitirá actuar de forma común en todo el país".
En la Región de Murcia lleva dos años trabajando con el Plan Estratégico de Salud Mental, con planes específicos en prevención de suicidio como la formación a los médicos de atención primaria, ya que son agentes claves en la detección de conductas suicidas, acciones de sensibilización para la población general, reducciones de los factores de riesgo y ofrecimiento de mecanismos de apoyo a quienes hayan tenido tentativas, así como a las personas afectadas por el suicidio de un ser querido.
