La Guardia Civil, a través del Seprona, se ha dirigido a un juzgado de Cartagena para insistir sobre el daño ambiental que sufre la zona y el riesgo para la salud de los vecinos
EVA CABALLERO. Cartagena
Medio Ambiente ha abierto expediente para sancionar a los propietarios de la antigua Zinsa-Cartagena, por no descontaminar las balsas donde se almacenan residuos tóxico.
La Guardia Civil, a través del Seprona, se ha dirigido a un juzgado de Cartagena para insistir sobre el daño ambiental que sufre la zona,con la muerte de varias aves envenenadas y el riesgo que puede suponer para la salud de los vecinos la contaminación de las aguas superficiales y subterráneas.
Segun fuentes de la Comunidad, el estado de alarma declarado durante la pandemia paralizó el recurso de los dueños sobre el proyecto para retirar los residuos. Ha sido este año, 2021, cuando la dirección general del Medio Natural desestimó la petición de la constructora y volvió a inspeccionar los terrenos de la antigua Zinsa. En mayo, los técnicos comprobaron que los residuos permanecían en el lugar, por lo que se inició el expediente para sancionar a los propietarios. Será el instructor de la Consejería de Medio Ambiente el que decida la sanción.
LOS VECINOS DE TORRECIEGA INTENSIFICARÁN LAS MOVILIZACIONES
Los vecinos más cercanos a la antigua ZINSA, en el barrio de Torreciega, dan dos meses de plazo para que empiece la descontaminación del suelo o amenazan con movilizaciones más intensas.
Su presidente, Teo Romero, apremia a la Administración regional a tomar cartas en el asunto y obligar a actuar al propietario, la empresa del constructor cartagenero Tomas Olivo.
Romero sostiene que la compañía Cartagena Parque dispone de recursos suficientes para afrontar la descontaminación de los terrenos.
Los vecinos de Torreciega se quejan del ruido de los cañones que instaló la constructora para espantar a las aves y evitar su muerte. Según Teo Romero, los aparatos son ruidosos e interrumpen su descanso.