El catedrático de inmunología de la Universidad de Murcia Pedro Aparicio explica que este complejo enseña a nuestra células a producir la proteína que desencadena nuestra respuesta inmunitaria frente al coronavirus
REDACCIÓN/ Murica
La vacuna de los laboratorios Moderna es del tipo "ARN mensajero", lo que quiere decir que en lugar de inyectarnos un germen atenuado como hacían las tradicionales, lo que hacen es enseñar a nuestras células a producir una proteína que es la que desencadena la respuesta inmunitaria. El catedrático de inmunología de la Universidad de Murcia Pedro Aparicio explica que lo que diferencia a la vacuna de Moderna de la que ya conocemos de los laboratorios Pfizer-BioNTech es la estrategia que emplea para hacer llegar el ARN con las instrucciones a nuestro organismo. En cualquiera de los dos casos, estamos -dice Aparicio- ante una revolución médica absolutamente excepcional.
Aparicio está convencido de la seguridad de estas vacunas, a pesar de que los ensayos clínicos se han realizado con toda la urgencia que requería la situación provocada por la pandemia de COVID. Pero la velocidad sólo implica que se han acortado al máximo los plazos para resolver cuestiones que ahora mismo son secundarias. Por ejemplo, para determinar si el periodo entre la primera y la segunda dosis puede estirarse más allá de los 21 / 28 días que recomienda el fabricante. Lo que dice la experiencia previa es que los resultados podrían ser incluso mejores si la segunda dosis se inyectara pasados tres o cuatro meses, y por eso Reino Unido ha optado por retrasar su administración, ganando así recursos para llegar a más población con la primera dosis. La decisión, dice Aparicio, es lógica, aunque no está respaldada por un ensayo clínico.
A este catedrático de Inmunología de la Universidad de Murcia le hemos pedido también opinión sobre las medidas que sería conveniente aplicar para tratar de frenar esta tercera ola que ha irrumpido tan abruptamente en la región. Aunque no es un experto en la materia, su punto de vista es puro sentido común: si fue posible frenar la segunda ola con restricciones más duras, y la tercera ha llegado cuando esas restricciones se han levantado, la respuesta lógica es que ha llegado el momento de volver a ponerlas en marcha.