El comandante, Juan Ortuño, jefe de los rastreadores del Ejército que han colaborado con el Servicio Murciano de Salud en la detección de casos de COVID, asegura que puede hacer un balance "muy positivo"
PACO MARTÍNEZ. Murcia
El comandante, Juan Ortuño, jefe de los rastreadores del Ejército, que durante los últimos meses, han colaborado con el Servicio Murciano de Salud en la detección de casos de COVID, asegura que puede hacer un balance muy positivo de la misión recién concluida. "El Ejército ha demostrado que tiene una enorme capacidad para adaptarse a situaciones inesperadas y eso les ha permitido ser útiles justo cuando eran más necesarios" según Ortuño.
Juan Ortuño ha explicado que el Ejército ha llegado a aportar a la Región de Murcia más de un centenar de rastreadores en los momentos más duros de la pandemia, aunque el total de militares que han participado de estas labores de control a lo largo de los meses multiplica con mucho esa cifra. Su trabajo de localización de casos y control de pacientes aislados les ha permitido sentirse muy cerca de la población civil e incluso ha dado para alguna que otra anécdota.
