A finales de julio localizaron a un ciudadano senegalés con un expediente de expulsión de nuestro país dentro de la labor de vigilancia de las condiciones sanitarias y de contratación laboral
La Guardia Civil e inspectores de trabajo de la Tesorería General de la Seguridad Social de Murcia, en la inspección a una de las dos fincas agrícolas de Bullas que supervisaron el pasado 30 de julio, sorprendieron a un ciudadano senegalés sobre el que pesaba un expediente de expulsión del país.
Fuentes de la Benemérita han señalado que estos dispositivos están dirigidos a realizar un seguimiento sobre la situación sociolaboral en zonas de concentración de jornaleros y temporeros, especialmente en los lugares más afectados por la pandemia del Covid-19, además de a detectar posibles irregularidades en materia laboral.Los agentes identificaron a un total de 25 trabajadores que realizaban tareas de recolección de fruta, cuatro de los cuales fueron trasladados a dependencias policiales para llevar a cabo su plena identificación.
Las gestiones practicadas permitieron averiguar que uno de ellos, de origen senegalés, se encontraba en situación administrativa irregular, al constarle un expediente de expulsión de territorio nacional, por lo que fue trasladado y puesto a disposición de Policía Nacional. Además, los efectivos de la Benemérita investigan si la empresa para la que el ciudadano extranjero trabajaba pudiera haber cometido algún ilícito penal. La Guardia Civil mantiene la labor preventiva y la vigilancia de entornos vulnerables, como son los trabajadores agrícolas que se desplazan fuera de su lugar de origen para llevar a cabo las temporadas de recolección, con el objetivo de evitar la propagación del Covid-19.