El Consejo de Gobierno ha aprobado el texto en el que no se recogen las zonas, ni los criterios que seguirán para delimitarlas. CCOO y STERM dicen que el decreto vuelve a ir contra la ley orgánica
PACO MARTÍNEZ. Murcia
El Gobierno regional sigue decidido a tratar de esquivar en lo posible las disposiciones contempladas en la Ley Orgánica de Educación, la conocida como LOMLOE o Ley Celaá. El Consejo de Gobierno ha aprobado un decreto de admisión que no delimita las zonas escolares, pero que promete emplear un criterio de proximidad tan laxo que no sea un obstáculo para acceder a un centro privado concertado. De hecho, en la rueda de prensa posterior al consejo, el portavoz del ejecutivo, Marcos Ortuño, ha asegurado textualmente que se mantendrá la validez del actual sistema de "distrito único en cada municipio".
La LOMLOE establece la proximidad al centro como un criterio básico en el proceso de admisión. Con esa fórmula, pretende evitar la segregación escolar y la aparición de colegios guetos y forzar un mayor equilibrio entre centros públicos y privados a la hora de admitir a alumnos con necesidades educativas especiales. El Gobierno regional insiste en defender el modelo que describe como de "libertad de elección", en el que no se apliquen criterios estrictos de proximidad de tal forma que cualquier familia pueda solicitar plaza en cualquier colegio, lo que desde el punto de vista del Partido Popular "es la mejor garantía para favorecer la igualdad de oportunidades".
El borrador del decreto de admisión elaborado por el Ejecutivo murciano mereció las críticas de los Servicios Jurídicos de la Consejería, del Consejo Escolar de la Región de Murcia y del propio Consejo Jurídico, que alertó de que la normativa regional no podía dejar de cumplir los principios establecidos por una norma de rango superior como la LOMLOE. El texto finalmente aprobado hoy por el Consejo de Gobierno no define las zonas ni los criterios que se seguirán para delimitarlas, aunque habla de que se tendrán en cuenta factores como la evolución demográfica o las condiciones de acceso. Lo que sí especifica es que esas zonas serán "lo suficientemente amplias" para asegurar la libertad de elección de centro docente por parte de las familias, más allá del barrio de residencia. En palabras del consejero de Presidencia y portavoz del Gobierno, Marcos Ortuño, lo que en la práctica se pretende es mantener el modelo actual: un distrito único por municipio.
La reacción de los sindicatos no se ha hecho esperar. Diego Fernández, de CCOO, dice que el decreto vuelve a ir contra la Ley Orgánica. Al representante de la Federación de Enseñanza de Comisiones Obreras le parece que el objetivo del Gobierno regional está muy claro: mantener a cualquier precio el trato de privilegio que otorga a los colegios privados.
De la misma opinión es el portavoz de STERM Intersindical, José Manuel Fernández. Él también cree que el decreto de admisión va contra el espíritu de la LOMLOE, porque el Ejecutivo regional no quiere reconocer el papel complementario y no central que la ley otorga a la educación concertada. STERM piensa además plantear un recurso contra el decreto porque en su redacción la Administración regional no ha tenido en cuenta a los ayuntamientos, a los que sólo piensa consultar "a posteriori".
