Se trata de una cruz de doble brazo en forma de colgante que data del siglo XVI
ENRIQUE SOLER
Aparece una réplica de la cruz de Caravaca en un yacimiento en el valle de Reuss en Suiza. Se trata de una cruz de doble brazo en forma de colgante que data del siglo XVI. El hallazgo se ha producido en el osario de la necrópolis, donde se ubica una antigua capilla del siglo XIII que tuvo conexión española.
El director de los museos de Caravaca, Indalecio Pozo, explica que Misioneros, limosneros y peregrinos la han llevado hasta prácticamente todos los rincones del planeta.
En Europa, la presencia de la cruz de Caravaca está muy extendida en países como Francia, Cracovia, Suiza y Bruselas, donde llegó de la mano de Ana de San Bartolomé la Cruz que portó durante su vida la doctora de la iglesia Santa Teresa de Jesús.