Su último periplo lo llevará a la Palma y Alicante, donde los ciudadanos podrán visitarlo por última vez
El buque de vigilancia Infanta Elena ha cumplido 43 años velando por la seguridad marítima en aguas españolas. Ha cumplido misiones contra la contaminación, el rescate de náufragos o la persecución de las mafias que trafican con personas. El Infanta Elena también ha colaborado en la lucha contra el terrorismo y el narcotráfico.
Este miércoles zarpará de Cartagena para afrontar, por última vez, labores de vigilancia en el Mediterráneo sur; colaborará en una regata en Cádiz y atracará en Palma y Alicante para terminar con una jornada de Puertas Abiertas.
En Alicante se celebrará el arriado solemne del Infanta Elena, el mismo puerto donde el Infanta Elena recibió su bandera de combate