El Ayuntamiento de Cartagena y la Comunidad respaldan esta reivindicación, ya que la situación supone un riesgo para las viviendas cercanas
Vecinos de Alumbres vuelven a reivindicar una variante ferroviaria que evite el paso de los trenes de mercancías por este núcleo cartagenero. Temen que con la nueva dársena de Barlomar, aumente el tráfico ferroviario y se triplique el número de vagones que circulan con materias peligrosas por el centro de la diputación.
Los ciudadanos afectados han trasladado su preocupación tanto a la alcaldesa como al consejero de Fomento. El presidente del colectivo, Fulgencio Andreu, opina que es responsabilidad del Puerto de Cartagena acometer la variante para mejorar el tráfico de mercancías, como hizo en Camarillas. La alcaldesa, Noelia Arroyo, que está de acuerdo desviar los trenes de Alumbres, reclama fondos europeos para la obra del AVE a Cartagena, y denuncia que aún está sin definir la integración del ferrocarril en la ciudad.
Sigue en el aire, también, la vía de evacuación de Alumbres por si hubiera una catástrofe en el Valle de Escombreras. Los vecinos lamentan que la crisis de 2009 paralizara el proyecto y, según el consejero de Fomento, José Ramón Diez de Revenga, habría que revisarlo, aunque no lo considera una cuestión urgente.
La circunvalación ferroviaria de Alumbres es una reivindicación histórica de los vecinos, que comparten también los de Torreciega. Las asociaciones vecinales reclaman que los convoyes dejen de circular cerca de las viviendas, por la peligrosidad que supone tanto para las infraestructuras de la ciudad como para la ciudadanía.
