El Consejo de la Transparencia de la Región ha presentado hoy un estudio que analiza trece instituciones de la región. El acto ha tenido un marcado carácter de reivindicación y apoyo a la labor del Consejo, tras las tensiones con el Gobierno regional
REDACCIÓN. Murcia
El Consejo de la Transparencia de la Región ha presentado hoy el primer informe en el que evalúa la cantidad, calidad y accesibilidad de la información que ofrecen a través de sus páginas web trece instituciones de la comunidad. El estudio se ha realizado siguiendo los criterios básicos del método aprobado a nivel nacional, pero ha tenido que limitarse a un reducido grupo de sujetos por la escasez de medios que sufre el Consejo. Por esa razón no han sido incluidos grandes organismos como el Servicio Murciano de Salud y sólo aparecen instituciones de pequeño o medio tamaño.
De las analizadas, la que peor cumple con las obligaciones que establece la Ley de Transparencia es la Federación Murciana de Fútbol. También suspenden la organización agraria ASAJA, las Federaciones de Empresarios de la Construcción y del Metal, y dos instituciones públicas: el IMIDA (el Instituto de Investigación Agraria) y la Entidad de Saneamiento de Aguas, ambas dependientes de la Consejería de Agua y Agricultura. En el otro extremo están el Colegio de Farmaceúticos y el de Ingenieros Industriales. También aprueban la Cámara de Comercio de Lorca y, entre los organismo públicos, el Servicio de Empleo y Formación, el SEF, adscrito a la Consejería de Empleo, y la Fundación Para la Formación e Investigación Sanitaria, dependiente de Sanidad.
APOYO A LA LABOR DEL CONSEJO
La presentación de este primer informe de evaluación del Consejo de la Transparencia se ha convertido en un acto de autoafirmación y de apoyo al trabajo que viene desarrollando este organismo y su presidente, José Molina, que en las últimas semanas se ha visto inmerso en una fuerte polémica con el Gobierno Regional, al que acusa de limitar la capacidad de actuación del Consejo por no facilitarle los medios técnicos y humanos imprescindibles.
Hoy no ha asistido al acto ningún representante ni del gobierno ni del Partido Popular, pero sí había representación -en primera fila- del resto de grupos parlamentarios de la Asamblea: diputados de PSOE, Podemos y Ciudadanos han compartido un lugar de preferencia junto al expresidente de la Comunidad Autónoma Alberto Garre. La ovación de la mañana se la ha llevado el Presidente del Consejo, José Molina, que ha reivindicado el papel clave que este organismo tiene para garantizar el futuro de la democracia española y ha asegurado que "a pesar de las presiones" no le ha pasado por la cabeza la posibilidad de dimitir.
QUEJAS POR LA ESCASEZ DE MEDIOS
Las referencias a la escasez de medios del Consejo han aparecido una y otra vez a lo largo de la mañana. Se ha contado -por ejemplo- que el presidente paga de su bolsillo todos los viajes que hace en función de su cargo; que el informe se ha tenido que realizar copiando datos en una tabla excel y no con a través de una plataforma en la nube, porque no hay soporte para ese sistema; y que de su redacción se ha encargado un estudiante de doctorado, becado por la Universidad de Murcia, porque no hay más personal disponible.
El director del departamento de Ciencia Política de la propia universidad, miembro del grupo en España de Transparencia Internacional, Fernando Jiménez, cree que el Gobierno Regional debe entender de una vez por todas cuál es la naturaleza de un organismo independiente y dejar de protagonizar episodios que ha calificado de "patéticos". El Consejo de la Transparencia -ha dicho- está para ser "incómodo"; o -como él mismo ha dicho- una "mosca cojonera".
