Antonio Soler, presidente de la plataforma, explica que el proyecto analiza cómo influyen las buenas prácticas agrícolas en la fijación de este gas de efecto invernadero
MACU ALEMÁN. Murcia
La investigación permitirá concretar cuánto carbono podrían capturar suelos degradados de la Región de Murcia, con el objetivo final de reducir la factura que paga cada año el Estado por sus emisiones de gases de efecto invernadero, en cumplimiento de protocolos internacionales contra el cambio climático.
Los expertos analizan los efectos en la captura de carbono de las buenas prácticas de cultivo, como la incorporación de materia orgánicas, descansos entre laboreos o la instalación de cubiertas vegetales. Un ejemplo práctico de cómo la lucha contra el cambio climático supone nuevas oportunidades de actividades económicas.