El PP obtendría entre 20-21 escaños, el PSOE 14-15, VOX 7, Podemos 3, y Cs no entraría en la Asamblea. Unos 120.000 murcianos todavía no saben a quien van a votar, según el barómetro
ISABEL GONZÁLEZ/ PACO MARTÍNEZ
El barómetro de primavera del CEMOP que se ha presentado esta mañana, dibuja un panorama electoral en el que nada se mueve respecto a los resultados del sondeo de invierno: el PP se perfila como ganador de las próximas elecciones sin mayoría absoluta (20 ó 21 escaños); el PSOE sería la segunda fuerza con 14 ó 15 diputados; VOX obtendría 7, PODEMOS 3 y Ciudadanos se quedaría sin representación en la Asamblea Regional. Esa es la foto fija en este momento. Los autores del barómetro sostienen que es muy improbable un vuelco radical en estos resultados, pero matizan al mismo tiempo que hay todavía margen para cambios que podrían llegar a ser significativos.
Los codirectores del barómetro, Juan José García Escribano e Ismael Crespo, nos han explicado esta mañana que la estructura política de esta región permanece inalterable desde hace 30 años. En Murcia hay un 60% de votantes de derecha o extrema derecha, y un 40% de votantes progresistas. Eso no ha cambiado en las últimas décadas y no va a cambiar en estas próximas elecciones. Sin embargo, dentro de cada segmento ideológico, incluso en la frontera entre ambos, hay movimientos que pueden causar variaciones sobre los resultados que su encuesta predice. De hecho, este barómetro estima un mayor número de electores dudosos que el anterior: hay hasta 120.000 murcianos que dicen que irán a votar pero que todavía no tienen claro a quién. Y la mayoría de esos votos "fluctuantes" se debaten entre PP ó PSOE y entre PP ó VOX, según indica Ismael Crespo.
Hay otro factor que puede mover los resultados finales: el voto útil, el de aquellos electores que hoy dicen preferir una formación pero que, en función de cómo se desarrolle la campaña electoral, podrían considerar más eficaz dar su apoyo a una candidatura diferente. La encuesta detecta dónde está la mayor bolsa de ese posible voto útil: 3 de cada diez votantes del PP, miran de reojo a VOX y casi la mitad de los votantes de VOX señalan al PP como su segunda opción.
La tercera incógnita significativa es la abstención, especialmente importante en el caso del PSOE, que tiene 40.000 antiguos votantes que a fecha de hoy no tienen muy claro si acudirán a las urnas el 28M. A eso, habría que sumar otros 27.000 electores que apoyaron en los últimos comicios a Ciudadanos y que en este momento se inclinan por la abstención.
Anticipándose a las críticas, los codirectores del barómetro ya pedían esta mañana a los grupos parlamentarios que no cuestionen los resultados de la encuesta. El barómetro, decía Juan José García Escribano, no debería ser puesto en tela de juicio porque puede fallar en sus predicciones (como cualquier otro sondeo) pero es una herramienta muy útil tanto para los partidos políticos como para otras organizaciones.
García Escribano ha vuelto a defender el rigor académico de todos los especialistas que componen el equipo de investigación del CEMOP y ha asegurado que jamás manipularían los datos aunque sólo fuera para evitar una mancha sobre la Universidad de Murcia a la que pertenecen.
El barómetro recoge también datos de popularidad y valoración de los líderes regionales. Ambas clasificaciones las encabeza Fernando López Miras que es el más conocido y el mejor puntuado, con una nota de 5,3. Al candidato socialista José Vélez sólo lo conoce una tercera parte de los encuestados, que le dan una nota de 4,2. Algo mejor es la valoración de la portavoz de PODEMOS, María Marín, con un 4,3 y un 19% de popularidad. La peor nota es para el presidente regional de VOX, José Ángel Antelo, que obtiene un 3,6 con un 23% de popularidad; la más desconocida es la coordinadora regional de Ciudadanos, Maria José Ros, a la que sólo identifican un 13% de los encuestados que, no obstante, le otorgan una puntuación de 3,9.
Dice también la encuesta del CEMOP que el problema que más preocupa a los murcianos sigue siendo -como casi siempre- el paro. Pero en los siguientes puestos de esa clasificación hay algunas novedades más o menos llamativas: el agua ha reaparecido como el segundo gran problema de esta comunidad; el Gobierno regional está en tercer lugar de la lista, convertido en la mayor preocupación para más de un 8% de los encuestados; y el cuarto lugar es para la situación de la sanidad, demostrando que el debate ha calado entre la población.
Si tomamos como referencia el barómetro anterior, el de invierno, la preocupación por el agua va en aumento. Este sondeo incluye precisamente una pregunta propuesta por un grupo parlamentario que arroja un resultado llamativo: el 78% de los encuestados da por seguro un recorte del trasvase y considera que afectará mucho o bastante a los hogares de la región. Dice Juan José García Escribano, que este repunte de la preocupación puede estar influida por la proximidad de las elecciones, que también pueden condicionar el hecho de que el Gobierno regional sea visto en sí mismo como un problema.
El Mar Menor sigue cayendo entre las preocupaciones de los murcianos, pasando del séptimo al octavo lugar. Por el contrario, lo que sí parece consolidarse a lo largo de las últimas encuestas es el problema de la sanidad.
El CEMOP ha querido recabar la opinión que de las encuestas tienen los ciudadanos en un momento en el que las críticas sobre sus resultados (hay que recordar la polémica que envuelve por ejemplo a las del CIS) y el resultado ha sido de una desconfianza del 60%.
Aun reconociendo su utilidad como herramienta de la democracia, los murcianos tienen poca fe en los sondeos y solo el 40% confía en los resultados. Las razones habría que buscarlas en los fallos trascendentales en que algunas han incurrido. Han citado las relativas al BREXIT, aquellas relativas a Donald Trump y también a algunas preelectorales en nuestro país.