Los encierros de este año se saldan con dos heridos por asta de toro que evolucionan favorablemente
La ganadería salmantina ha protagonizado un encierro complicado y no exento de peligro. Los cabestros se adelantaron a gran velocidad, mientras que la manada se ha separado y ha llegado hasta la plaza de toros a un ritmo más lento.
Un novillo se quedó rezagado y llegó hasta el coso dando tirones, cruzándose de un lado al otro del recorrido. Una jornada más los pastores se han tenido que emplear a fondo para conducirlo hasta los corrales. 6:15 han tardado los de Barcial en finalizar el último encierro, donde no ha habido incidentes.
Esta edición 2023 se salda con dos heridos por asta de toro que evolucionan favorablemente.