El titular del juzgado número 4 de Cartagena ha convocado al Comité de Representantes de la laguna para que se persone en el caso que investiga la contaminación de la balsa Jenny
Por primera vez, un juez ha aplicado la ley que reconoce la personalidad jurídica del Mar Menor. Se trata del magistrado Raúl Sánchez Conesa, titular del juzgado número 4 de Cartagena.
En el auto convoca al Comité de Representantes de la laguna, Comunidad Autónoma y Estado, para que se personen en el caso que investiga la contaminación de residuos mineros producida por la balsa Jenny y el vertedero Los Blancos.
La noticia ha sido confirmada por la profesora de Filosofía del Derecho y directora de la Cátedra de Derechos Humanos y de la Naturaleza de la UMU, y promotora de la ILP del Mar Menor, Teresa Vicente, que asegura que se trata de una llamada de atención. "Una de las grandezas de la ley es que no tiene que esperar al reglamento porque cualquier persona es la voz del Mar Menor porque todos somos el Mar Menor, y eso lo ha interpretado muy bien el juez".
La ministra en funciones para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, se comprometió a que el Reglamento para la gobernanza del Mar Menor quedaría aprobado en Consejo de Ministros durante este mes. El Ministerio sacó a información pública el pasado marzo el Reglamento que desarrolla la Ley para el reconocimiento de personalidad jurídica a la laguna, pero este aún no se ha aprobado, por lo que el Comité de Representantes del Mar Menor no se ha creado todavía y no puede personarse en ese caso.
El juzgado 4 de Cartagena investiga la responsabilidad administrativa del proyecto de sellado de la balsa Jenny realizado por la Comunidad Autónoma y denunciado por el Seprona en 2013. Se trata de una pieza derivada del caso principal sobre esta balsa de residuos mineros situada en la Sierra Minera para aclarar qué responsabilidad administrativa se deriva del fallido sellado de la balsa Jenny y del traslado de los residuos a la corta de Los Blancos. Agentes del Seprona denunciaron los vertidos procedentes de la balsa, a pesar de las obligaciones de la evaluación de impacto ambiental
La ley que otorga personalidad jurídica del Mar Menor, primer espacio natural europeo con ese reconocimiento, se ha basado en las experiencias de países de América y Oceanía en los que se ha dotado a ríos o lagos con ese reconocimiento legal, que pretende servir de herramienta para la protección "eficaz" de importantes ecosistemas de gran valor ecológico que "se encuentran amenazados por el modelo actual de producción y consumo".
El objetivo de este texto es que el Mar Menor "tenga una carta de derechos que respete su ley ecológica y garantice sus legítimos derechos a vivir, a reparar el daño y a recuperarse". Además, servirá para "perseguir y sancionar a aquellas personas, empresas o entidades que agredan al ecosistema".
