La presidenta de la Asociación de Directivos de Secundaria, Isabel Saturno, reconoce que tienen impagos de la Administración regional y que priorizan el pago a proveedores más pequeños
La deuda que la Consejería de Educación mantiene en estos momentos con los 120 centros de educación secundaria de la Región de Murcia ronda los 5.000.000 de euros, calculando una media de unos 40.000 euros por centro. El resultado, según nos confiesa la presidenta de la Asociación de Directivos de Secundaria Isabel Saturno, es que son muchos los institutos que han dejado de pagar las facturas de electricidad para poder cubrir otros gastos urgentes.
La de este año, nos dice Saturno, es una situación anómala. No es la primera vez que la Consejería de Educación se retrasa en la transferencia de fondos a los institutos, pero nunca ha acumulado una deuda tan importante. La Administración Regional se ha comprometido a saldar todos los abonos pendientes durante el primer trimestre de 2025, aunque la presidenta de la Asociación de Directivos dice que necesitan recibir al menos un adelanto antes de final de año para poder resolver las situaciones más apremiantes.
Ahora mismo, según Isabel Saturno, son muchos los institutos que acumulan facturas de luz impagadas. Lo hacen sabiendo que la compañía no puede cortar el suministro a los centros educativos. El poco dinero que les queda lo están empleando en pagar a los proveedores locales, cuyos negocios dependen en buena medida de lo que facturan a los institutos.
Hay que tener en cuenta que los centros de secundaria dependen del dinero de la Consejería en mayor medida que los colegios de primaria, cuyas facturas de electricidad, agua o calefacción corren por cuenta de los Ayuntamientos. Los institutos tienen que hacer frente a todos los suministros básicos con los recursos que reciben de la Administración Regional.
