La ONG ha realizado un estudio en el que insta a eliminar hasta el año 2040 entre un 25 y un 30 por ciento de la superficie total de regadío en el país, un millón y medio de hectáreas
En la Región de Murcia habría que limitar 21.000 hectáreas de regadío, además de las que se riegan de forma ilegal, para hacer que nuestro campo sea sostenible. Es el cálculo que la ONG Greenpeace a raíz de un estudio que concluye que en el conjunto del país habría que reducir la superficie de regadío de aquí a 2040 entre un 25 y un 30 %.
Esto supondría la eliminación o reconversión a secano de casi un millón de hectáreas de cultivo que ahora se riegan en España. Julio Barea, responsable del Programa de Campaña de Aguas de Greenpeace, alerta de que si esa eliminación de regadío no se produce, el país está abocado a un "colapso hídrico".
La agricultura intensiva e industrial en la Región de Murcia depende en buena parte del agua que viene al Levante español desde el trasvase. Barea considera que esta particularidad del campo de nuestra comunidad es un añadido que lo hace más vulnerable al nuevo contexto hídrico provocado por el calentamiento global.
Con una población creciente y que además vive más tiempo, el alimentar a más personas con un campo cada vez menos eficiente es un reto. Para este portavoz de Greenpeace, la solución pasa por contener el desperdicio alimentario. Ahora se desechan el 40 % de los alimentos que produce el sector primario, según recuerda Julio Barea.