El líder laborista ya ocupa el 10 de Dowing Street tras la confirmación por parte del rey, Carlos III en el Palacio de Buckingham
Tras la arrolladora victoria de los laboristas en las elecciones de Reino Unido, el rey Carlos III ha oficializado al líder del Partido Laborista, Keir Starmer, como nuevo primer ministro de Reino Unido, tras una reunión en el Palacio de Buckingham que ha completado la tradicional coreografía protocolaria tras unas elecciones generales.
En primer lugar, ha desfilado por palacio el primer ministro saliente, Rishi Sunak, que ha asumido en una comparecencia pública la clara derrota electoral de su partido y ha anunciado incluso que presentaría su dimisión como líder 'tory'.
Después de Sunak, le ha llegado el turno a Starmer, claro vencedor de los comicios del jueves. El Partido Laborista ha obtenido 412 diputados, frente a los 121 logrados por el Partido Conservador, según los resultados oficiales que ya están prácticamente concluidos --a falta del reparto de dos escaños--.
Starmer se instalará ahora en el número 10 de Downing Street, residencia oficial del primer ministro. Entre sus primeras tareas está la configuración de su nuevo gabinete, donde incorporará a parte de los laboristas que obtuvieron un escaño en estas elecciones.
A las puertas de su nuevo hogar, el nuevo Primer Ministro ha reconocido que el cambio puede tardar en llegar, ya que "un país no es como pulsar un interruptor". "Mi gobierno va a luchar cada día para que volváis a creer. A partir de ahora tenéis un gobierno sin doctrina, solamente guiado por la decisión de servir a vuestros intereses y desafiar a los que han arruinado el país", ha dicho.
"Nos habéis dado un mandato claro y lo utilizaremos para producir el cambio", ha señalado un Starmer en cuyo discurso ha fijado ya algunos de sus próximos objetivos, como mejorar el sistema de salud, reducir la factura energética, así como la política migratoria y "limpiar" las instituciones. "Para eso hará falta tiempo, pero que no os quede duda de que el cambio empezará inmediatamente. Que no os quepa duda de que reconstruiremos Reino Unido", ha prometido.