Se trata de combustibles elaborados a partir de residuos agroalimentarios y orgánicos como el aceite usado, que podrán utilizarse en cualquier medio de transporte
El complejo de Repsol en Cartagena ha comenzado ya la producción a escala industrial de combustibles renovables en su nueva planta de Escombreras en la que ha invertido 250 millones de euros. La multinacional ha habilitado un área en Escombreras para almacenar 300.000 toneladas anuales de residuos orgánicos que llegarán por vía marítima.
Se trata de combustibles elaborados a partir de residuos agroalimentarios y orgánicos como el aceite usado, que podrán utilizarse en cualquier medio de transporte, automóviles, camiones, barcos o aviones, según señala la multinacional en un comunicado. La producción de esta planta permitirá evitar 900.000 toneladas de CO2 al año, ya que estos combustibles renovables emiten un noventa por ciento menos de C02 que los convencionales procedentes del petróleo explica Antonio Mestre director de la refinería de Escombreras.
Mil doscientos trabajadores y 140 empresas auxiliares han participado en el diseño, construcción y puesta en marcha de la nueva planta durante los últimos tres años.
El proyecto de Repsol ha supuesto también la adecuación de un área en el puerto de Escombreras, donde ya opera la multinacional, para almacenar cerca de 300 mil toneladas anuales de residuos y aceites usados que llegarán por vía marítima, principalmente de otros puntos de España y Europa. Las actividades de la compañía suponen el 63% del tráfico portuario de Cartagena.