Es el principal objetivo de la Comisión de Atención Primaria y Salud Mental, que ha comenzado a funcionar este viernes y mejorará la colaboración entre ambos niveles de atención
Reducir el uso de psicofármacos y dotar a la población de herramientas para manejar los problemas más habituales relacionados con la salud mental es lo que se busca mediante la coordinación de distintos niveles asistenciales.
Este viernes se iniciaban los trabajos de la nueva Comisión de Atención Primaria y Salud Mental que aborda la coordinación entre ambos niveles asistenciales. El consejero Juan José Pedreño detallaba minutos antes del encuentro que uno de los objetivos más relevantes es la reducción del consumo de fármacos. Que la vida, dice, no dependa de una pastilla.
Muchos de las patologías que llegan a los centros de atención primaria están relacionados con el manejo de situaciones cotidianas. El manejo del estrés, el insomnio, los momentos iniciales de un proceso de depresión. Dice el consejero que con la intervención de los expertos -psicólogos y psiquiatras- las terapias al margen de las pastillas, funcionan.
La comisión forma parte de la Estrategia de Mejora de Salud Mental 2023-2026 cuenta con más de 41 millones de euros previstos para ampliación de plantilla con 208 nuevos profesionales y nuevos centros de salud mental y ampliaciones de las unidades de hospitalización.
