La concentración de sanitarios, celebrada en ese cetro y en el Rossell, se repetirá el 9 de mayo. Los afectados siguen en shock después de que una persona propinara un puñetazo a un médico e invadieran el servicio
UGT reclama más médicos y más seguridad en los servicios de urgencias tras la agresión a un facultativo en el hospital de Santa Lucía en Cartagena. Además de concentrarse hoy en este centro y en el Rossell, siguiendo la convocatoria del colegio de médicos, el próximo 9 de mayo repetirán sus protestas.
Mari Carmen Andreu, que hoy atiende urgencias en el Rossell, dice que los compañeros afectados siguen en estado de shock, después de que una persona propinara un puñetazo al facultativo que le comunicó la muerte de un familiar y una veintena de parientes invadieran el servicio, persiguiendo al personal. Otra médico de guardia tuvo que avisar a la policía, según Andreu, porque los 6 guardias de seguridad se quedaron paralizados.
Refuerzo de seguridad y de facultativos es lo que demanda UGT para frenar las agresiones. De esta forma se podría controlar el acceso del público y tardarían menos tiempo en atender a los pacientes que se acumulan hasta de madrugada en la sala de espera.