El responsable de Salud Laboral en CCOO, Juan Blázquez, dice que han detectado que durante las vacaciones, las plantillas se reducen de manera muy significativa pero la actividad de esos sectores no decae al mismo ritmo
La Inspección de Trabajo ha sancionado este verano a los cinco establecimientos que tiene en Murcia una conocida cadena de comida rápida por no tomar medidas para evitar las altísimas temperatura que se alcanzaban en sus cocinas, que llegaron a provocar el desvanecimiento de algún trabajador. Nos lo ha contado el responsable de Salud Laboral en CCOO, Juan Blázquez, que reconoce que esta exposición al calor es un asunto que preocupa a los sindicatos de toda Europa, que manejan informes médicos que revelan consecuencias a largo plazo que, en los casos más graves, derivan en enfermedades cardiovasculares.
Dice Blázquez que el verano no es una buena época para los trabajadores que no están de vacaciones. El calor se ha convertido en un problema recurrente en muchos puestos, y no sólo en actividades que se realizan al aire libre. Las cocinas de algunos restaurantes pueden convertirse en un infierno.
Los golpes de calor son un asunto muy serio, pero hay otras patologías que abundan especialmente en verano, como los infartos o los ictus. Y hay informes, dice Blázquez, que relacionan estos episodios con una exposición previa al calor cuyos efectos no se aprecian hasta muchos años más tarde.
Las altas temperaturas no son el único problema recurrente del verano. Los sindicatos han identificado una situación que también se repite en centros comerciales o call-centers: durante las vacaciones, las plantillas se reducen de manera muy significativa. Pero la actividad de esos sectores no decae al mismo ritmo y eso se traduce en una sobrecarga de trabajo que puede provocar problemas serios: